Warhammer 40.000 siempre ha sido uno de mis juegos favoritos. Lo conocí allá por el 93, cuando salió la Segunda Edición en España, y rápidamente me cautivó. Ya conocía algo por el juego Cruzada Estelar, pero al leer más y más sobre ese fascinante Cuadragésimo Primer Milenio, más quería saber. Ya tenía el Warhammer, pero no podía permitirme comprar otro juego... Tendría que conformarme con la escasa información de la White Dwarf.
Un tiempo después ingresé en un club de rol, donde se jugaba a Warhammer, pero no a 40K. Traté de contagiar mi entusiasmo, hasta que finalmente, en unas jornadas y gracias a la magia de la fotorreprografía (¡Qué tiempos aquellos en los que no había internet!) obtuve mis "manuales" (je, je, je). Había que organizar una partida. Rompí la hucha para hacer unas compras de última hora: acababa de salir el Codex: Tiránidos, y tras leer sobre ellos en las White Dwarf 13 y 14, decidí que ese sería mi ejército, así que me compré el Codex y un bióvoro con el dinero que tenía (aún recuerdo ese horrible bióvoro...).
Nos juntamos todos los chavales del club, reunimos varios "Cruzada Estelar", e incluso nos prestaron las figuras de un Space Hulk, y nos reunimos en la sede del club (para consternación de los socios más mayores xD) para una partida caótica y desequilibrada a cinco bandos que fue terriblemente divertida.
Ese fue mi verdadero inicio en 40K, y a partir de ahí mi ejército tiránido comenzó a crecer (a la par que los de mis colegas). Nos encantaba el oscuro ambiente del juego, con su pizca de humor negro, su elaborado trasfondo y sus reglas tan personales que daban la sensación de encontrarse uno en el campo de batalla.
Pasaron los años y volaron las anécdotas (como la de los Tiránidos Troquelados, los Ángeles Butaneros o los chistes de "se abre el telón", pero esas historias serán contadas a su debido tiempo), hasta que el año 1998 trajo la Tercera Edición. El cambio nos sobrecogió a todos, a nivel de reglas primero (el manual básico tenía su trasfondo) y a nivel del trasfondo tras la aparición de los Codex. Durante un tiempo algunos seguimos jugando a la Segunda, pero la presión grupal y la aparición de nuevas tropas hizo que finalmente abandonásemos las viejas maneras uno a uno.
La aparición de los Index Astartes y algunas novelas, así como el Codex: Marines espaciales del Caos (el codex negro del Caos, el de las legiones) nos llevaron a un amigo y a mí a comenzar con un proyecto de adaptar las nuevas tropas, personajes y equipo (que habían cobrado verdadera vida gracias al trasfondo, y no imaginábamos una batalla sin ello) para usarlos con las reglas de la Segunda Edición. Este proyecto acabó recibiendo el nombre de 40K Reloaded. Con el tiempo hicimos varias versiones de reglas, pues trabajamos en esto durante años y salían constantemente tropas nuevas (y ejércitos enteros). Incluso modificamos en parte el reglamento básico.
La pérdida de buena parte del material en la hecatombe de mi ordenador de 2010 y la idea de que si queríamos plasmar correctamente nuestras ideas debíamos hacer un sistema nuevo nos llevó a abandonar el proyecto hace unos meses. Me apena por todo el tiempo invertido, pero queda el recuerdo de todas las partidas jugadas, de las situaciones vividas y de las historias contadas.
Bien es cierto que las reglas de la Quinta Edición no están del todo mal (lo que no quiere decir que estén bien: a veces crean situaciones muy estúpidas en los campos de batalla), pero estamos en un nuevo proyecto, con un sistema propio, para jugar batallas a una escala más pequeña y personalizada (dos o tres escuadras, un vehículo y un par de personajes).
Por si a alguien le interesa, dejo aquí links al material que sobrevivió a la Hecatombe. Algunos contienen, además de las reglas, una recopilación de trasfondo del ejército en cuestión. Están alojados en Scribd, desde donde podéis verlos on-line y descargarlo.
40K RELOADED: Modificaciones al reglamento de 2ª
Codex Necrones para 2ª
Codex Squat para 2ª
Codex Culto Genestealer 2ª
Addendum al codex Tiránidos
Addendum al Codex: Caos
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