Bienvenidos
al sexto de una serie de artículos de trasfondo sobre Planescape: se
trata de la traducción del capítulo 3 del entorno de campaña de
Planescape para D&D 3.5 realizado por la gente de Planewalker.es
(página ya desaparecida). Comenzamos a analizar cada facción en detalle. Hoy, la Fraternidad del Orden.
“¿Qué sucede con todo ese alboroto?” El anciano hombre se desplazó lentamente, levantándose de la silla. “¡Hubiese hallado ya lo oscuro de los engranajes de Mechanus si no fuese por esas malditas interrupciones!” Caminó lentamente fuera de su laboratorio hasta llegar al vestíbulo, siguiendo los gritos, los zumbidos mecánicos y los sonidos de guerra que surgían del santuario de la Fraternidad. Apenas parpadeó cuando una cuchilla giratoria se deslizó frente a su cara, dándole a su bigote un recorte perfecto, aunque no requerido. Otros jefes, blandiendo armas tanto antiguas como modernas, se movían alrededor en una sinfonía de orden que podía parecer caótica a ojos de un extraño. Pero estaban respondiendo de una forma organizada, perfectamente acorde con el protocolo local para defenderse de criaturas hostiles en este medio.
“Querido, ¿qué es lo que sucede?”
Un Jefe más joven y sin afeitar se lamentó. “¡Lo trajimos de Aqueronte!”
Más voces se sumaron al coro, sonando por encima de los golpes metálicos y los zumbidos de los extraños mecanismos. “¡Lo llaman Horror de relojería!”... “Parece originario de Baritus, un plano material primario en el que parece que hay...” ... “Tú, cabezacuero, ¿crees que un primario podía llegar a crear algo así?”
El hombre anciano observó mientras el insecto adamantino serraba a uno de sus compañeros limpiamente en dos sin siquiera pestañear. “No creo que os moleste que tome unas notas sobre esto, ¿verdad?”
La Fraternidad del Orden no es lo que un tío pudiera pensar en un primer momento. En primer lugar,su objetivo no es mantener el orden -para eso está el Harmónium. En segundo lugar... bueno, ya no son tan ordenados como solían ser. Ser expulsados de Sigil por la Dama los sacudió bastante, e insertó un poco de caos en la estancada mezcla que solían ser los Jefes. Pero el núcleo de su filosofía todavía gira completamente alrededor de las leyes y el orden. Verás, de acuerdo con esto, es de gran importancia entender las leyes, ya sean simples estatutos locales o los mismos axiomas de la realidad con los que todas las criaturas tienen que vivir. Para ellos, entender las leyes, -los Órdenes- por las que las cosas funcionan es vital para poder manipular las cosas para que sean de la forma en la que la gente las quiere y las necesita. Por supuesto, el tipo de poder que otorga la información tampoco es despreciable. Y no hay secreto que los Jefes no lleguen a conocer, más tarde o más temprano.
Por supuesto, si los escuchas el tiempo suficiente, te parecerá que están al mando. Y si sus teorías son correctas, esa puede ser la verdad...
Filosofía: Conoce las leyes que gobiernan el Multiverso y obtén poder a través de ellas.
Apodos: Jefes
Apodos: Jefes
Cuartel general: La Fortaleza de la Iluminación Disciplinada, en Mechanus
Principales razas: Enanos, humanos, gnomos, zénitres
Principales clases: Magos, psiónicos
Fáctol: Jamis (LB hembra humana Clérigo12 (Oghma ))
Miembros prominentes: Nancias Garabutos (LN hembra humana Maga11)
Alineamiento: Cualquiera no caótico.
Símbolo: Una daga con la empuñadura azul, apuntando hacia arriba. Trazos azules surgen de la punta y caen, dividiéndose mientras descienden, como si fuesen cortados por la propia daga. El filo del conocimiento revela la verdad.
FILOSOFÍA
Conocer la ley es algo relativamente simple, aunque a veces puede llevar mucho tiempo y pasta estudiarlas. Pero el conocimiento sobre cómo usar esas leyes es de donde viene el verdadero poder. Míralo de este modo: un hombre no sabe utilizar una roca como arma hasta que entiende la ley de la gravedad que le permite arrojarla desde una repisa; o incluso mejor, la ley de acción y reacción que le permite construir una catapulta para mandar la roca tan lejos como quiera. Imagina esto a una escala de todo el Multiverso y obtendrás un esbozo de lo que los jefes están intentando.
La Fraternidad del Orden cree que existen tres tipos de Órdenes. Las primeras son llamadas Reglas, creadas por los seres inteligentes para gobernarse a sí mismos y resolver disputas. Las segundas son llamadas Leyes, que derivan de los Poderes. Muchas Leyes son las leyes naturales que gobiernan cada plano -el ciclo del tiempo en las Tierras Exteriores, por ejemplo. Las terceras son conocidas como Axiomas. Los Axiomas son leyes a las que todos los seres -vivos o inertes, planares o primarios, mortales o divinos- deben adherirse. Algunos Axiomas son conocidos como Grandes Axiomas, que sólo los Poderes pueden comprender. Sin embargo, si un mortal adquiere la comprensión de uno de esos Grandes Axiomas, su misma existencia se amoldará a una nueva forma capaz de contener ese conocimiento. Si esto significa convertirse en un Poder o en algún otro tipo de ser es algo completamente teórico.
Otro truco con las leyes es descubrir Bucles. Usando los Bucles en las órdenes uno puede ser capaz de ganar un juicio, desarrollar un dispositivo para hervir el agua del té o incluso retorcer los Axiomas para realizar acciones que de otro modo serían imposibles. Mediante los Bucles, un tío puede llegar a hacer cualquier cosa, simplemente tiene que descubrir lo oscuro del asunto. Los Bucles en las Reglas son útiles en los tribunales, los Bucles en las Leyes son útiles en el laboratorio y los Bucles en los Axiomas... bueno, son útiles en todas partes; aunque uno sólo puede engañar al Multiverso un número de veces antes de que se dé cuenta y remedie la situación.
Algunos Jefes argumentan que las reglas no son creadas por los mortales, y que las leyes no son creadas por los Poderes. En realidad, son descubiertas, y la verdad es que hay un grupo universal de dichas Órdenes, y hay algunas que se han perdido o se han malinterpretado, mientras que otras aún no se han descubierto aún. La peña puede pensar que ha redactado una nueva ley, o un Poder puede pensar que un edicto es suyo, pero simplemente están reintroduciendo (o redescubriendo) una nueva Orden. Aunque algunos pueden argumentar que no hay tal cosa como Órdenes o Leyes universales debido a las variadas leyes de los distintas reinos y planos, estos Jefes contra-argumentarán con la idea de que las Órdenes pueden diferir a través del tiempo y el espacio. En su mente, esa idea no tiene relevancia, ya que creen que hay una Orden aún por descubrir que explicará la variación de las Leyes en los distintos lugares.
Aunque pueda parecer homogénea y monolítica a los ojos de extraños, la Fraternidad del orden se encuentra frecuentemente dividida en diferentes puntos de vista. Aunque todos están innegablemente dedicados a la ley, tienen diferentes puntos de vista acerca de lo que deben ser esas leyes. Incluso lo que es considerado “conocido” es a veces contradictorio, y los Jefes se han dado cuenta de que es muy difícil llegar a comprender el todo en su conjunto. Por supuesto, diferentes comisiones y sub-comisiones han ido creadas para hacer frente a este problema. Algunas veces forman estas comisiones para hacer frente a un problema concreto, mientras que otras veces lo hacen para estudiar a la perfección una determinada faceta del Multiverso. Algunas de estas comisiones se describen a continuación, pero hay literalmente miles de comisiones y sub-comisiones diferentes, tanto activos como inactivos, en los registros de los Jefes.
Una de las comisiones más grandes, los Matemáticos, está dedicada exclusivamente a conocer las Órdenes de Mechanus. Después de todo, la teoría dice que Mechanus representa toda ley, en cualquier lugar del Multiverso. De ese modo, un completo conocimiento de todas las Órdenes de Mechanus podría usarse en todos los lugares del Gran Anillo y más allá. Además, se dice que si alguien llega a conocer todas y cada una de las Órdenes de las ruedas de Mechanus obtendrá una revelación que le permitirá gobernar todo Mechanus... y el resto del Multiverso desde allí. No sólo eso: creen que el plano de la ley definitiva tiene una versión “perfecta” de todo lo que existe en el Multiverso. Así, si uno estudia Mechanus, uno puede hallar todo aquello que pueda desear. Anteriormente una secta escindida, los Matemáticos han vuelto al redil dentro de la Comisión de Matemáticas Nativas de la Fraternidad del Orden.
En el otro lado -el lado con los pies más pegados al suelo- algunos de los nuevos miembros de la facción claman que se está yendo muy rápido. Argumentan que su comprensión de las Reglas y las leyes es incompleto en el mejor de los casos, y que tratar de descubrir los Axiomas antes de tener un conocimiento más completo de las Órdenes más básicas es peligroso, o directamente demencial. Enfocados en utilizar el conocimiento que tienen en tareas más mundanas, muchos de estos jóvenes Jefes son exploradores, investigadores e inventores, buscando el conocimiento para fines más prácticos, como gólems o creaciones mecánicas para ayudarse en sus tareas de laboratorio. Sorprendentemente, aunque Jamis no comparte su retórica, muchos de los que han vuelto con ella a Sigil son de este grupo. Oficialmente, están organizados en la Comisión de los Guardianes del tiempo, incluso aunque sus tareas vayan más allá de hacer relojes.
Finalmente, una nueva teoría que, en el mejor de los casos genera controversia, y en el peor es considerada herejía, propone que la Fraternidad del Orden ha estado buscando en el lugar incorrecto para descubrir la ley. Una consecuencia de los intentos de
estudiar los elementos que conformaron la Guerra de las Facciones, estos estudiosos creen que solo intentando descubrir los patrones del caos puede uno descubrir la verdad del Multiverso. Creen que si uno puede descubrir las pautas y leyes que gobiernan la más desordenada de las fuerzas, esas leyes serán las Órdenes definitivas, aquellas que funcionan en la misma cara del caos más total. Aún no existe una comisión oficial para ellos; la mayoría se encuentran en la Comisión de Exploración y Desarrollo Extraplanar, o en la Comisión de Estudios Xenofilosóficos. Aunque son considerados como un montón de idiotas por la mayoría de los Jefes, han llegado a montar expediciones al Limbo. Actualmente están muy interesados tratando de descubrir lo oscuro de la habilidad e los nativos de influenciar la materia cruda del propio plano, pero para regocijo de los habitantes del Limbo, aún no lo han logrado.
BREVE HISTORIA
Siendo los ávidos devoradores de conocimiento que son, los Jefes han registrado prácticamente todo lo que han podido acerca de su propia historia. Sus registros llegan hasta un milenio atrás -incluso más- en millones de volúmenes que se encuentran a resguardo en sus bibliotecas en Mechanus. Algunos de sus registros son tan minuciosos que pueden poner a prueba la paciencia de, incluso, los propios Jefes... desde los ropajes que alguien llevaba en un día concreto hasta cuántos mocos resbalaban de la nariz de un orco durante un juicio. Pero para los Jefes, ningún detalle es trivial. Cualquier cosa puede ser una pieza del gran puzle que, día a día, tratan de completar. Consecuentemente, pocos de sus registros son interesantes desde una perspectiva artística o emocional. No tienen grandes héroes, no tienen relatos épicos, no tienen grandes desastres... al menos según el punto de vista de la mayoría de la peña. Por supuesto, con la cantidad de detalles mundanos que hay en los registros de los Jefes, incluso los grandes conflictos como la Guerra de las Facciones deben ser tan profundamente analizados que difícilmente parecerán más interesantes que las cenas del fáctol durante el año anterior. Los Jefes son buenos en los detalles, pero no hay demasiada pasión en sus trabajos escritos. Al fin y al cabo, la pasión distorsiona, y no quieren nada en sus archivos que no sean los hechos crudos y sin adornos.
La historia de la Fraternidad del Orden comienza en Sigil, con un puñado de sabios inclinados hacia la magia que habían llegado hasta la Jaula desde diversos planos materiales primarios. Una vez allí, formaron lo que los primarios llamarían una “escuela de magia”, eligiendo sus números de varios planos materiales primarios diferentes, como Toril o Cerilia. Por supuesto, tener que reconciliar las tradiciones mágicas de más de una docena de mundos era todo un desafío, así que trabajaron en desarrollar una teoría que pusiese al descubierto las leyes básicas de la magia. Olvídate de ver allí trabajando a esos hechiceros “nacidos para el poder”... en ese lugar se dedicaban a conocer qué era lo que, mediante saber y entrenamiento, permitía a un mago controlar una fuerza tan poderosa, tal vez la fuerza más poderosa del Multiverso.
Es sencillo para cualquiera que conozca cómo opera la Fraternidad del Orden ver cómo se ha desarrollado. Una vez que tuvieron una teoría para el asunto, empezaron a buscar formas de “engañar” a la magia. Aunque no lo consideraban más que la típica investigación en busca de nuevos conjuros, era lo que un Jefe moderno llamaría “estudio de los Bucles”. Su investigación tuvo éxito mucho más allá de sus creencias más salvajes, y algunos comenzaron a teorizar que las leyes de la magia no eran las únicas maleables. Su investigación los llevó, de forma natural, a Mechanus, donde crearon un segundo hogar para complementar su cuartel general en Sigil. Desde allí, lentamente gravitaron desde un estudio puro sobre la magia hacia un estudio del Multiverso en su conjunto.
Tomaron el nombre de “Fraternidad del Orden” no mucho antes de la Gran Convulsión para reemplazar a la “Orden Planar de la Magia”. Su estructura ordenada les permitió capear el nuevo edicto de la Dama sin apenas un parpadeo, simplemente reestructurando ligeramente sus actividades. Convirtiéndose, como el resto de facciones, en una pieza del gobierno de Sigil, tomaron el papel de registradores de datos, anotando las leyes, estadísticas, eventos y demás. Pero las leyes se convirtieron en su profesión, ya que siempre había alguien necesitando saber cuáles eran esas leyes, debido a los constantes enfrentamientos por el poder -tanto pequeños como grandes- en Sigil. Y, aunque no sea necesario decirlo, los Jefes usaron esto para su propio beneficio, interpretando y utilizando las leyes a su favor. Por supuesto, el hecho de que dirigiesen los Tribunales, muchas veces ejerciendo los papeles de juez, fiscal, abogado defensor y cronista, también les ayudó un poco. Aunque no podían crear nuevas leyes, eran capaces, ocasionalmente, de enterrar viejas leyes que no les interesasen.
Con el paso del tiempo la facción se volvió más complaciente. La influencia y el poder se cobraron su diezmo: aunque obtenían el poder del orden, también se encontraban atrapados por él. Más y más miembros se unieron sin más interés que estudiar las propias leyes de Sigil... los descuidos se fueron arrastrando, algo que habría sido considerado anatema en sus orígenes, cuando seleccionaban sólo las mentes más brillantes de los planos. La facción se convirtió en un refugio para la gente rígida y poco imaginativa, y si idea original de exploración y búsqueda quedó sepultada por una montaña de burocracia y papeleo, y un infernal laberinto de regulaciones internas. Un cierto número de viejos Jefes, descontentos con la situación, regresaron a Mechanus para tratar de recuperar las creencias que su facción había dejado atrás. Particularmente interesados en estudiar Mechanus una vez más, se unieron con algunos Jefes desilusionados de allí , escindiéndose de la facción y formando la secta de los Matemáticos. Se marcharon para estudiar Mechanus solos, aunque en ocasiones compartían notas con los Jefes de allí.
Hace no mucho tiempo, la fáctol de la Fraternidad del Orden conocida como Lariset la Inescapable se encerró a sí misma, explicando brevemente durante sus escasas salidas que se encontraba a punto de realizar un nuevo descubrimiento. Un día,simplemente se desvaneció, y la mayoría de los Jefes asumieron que había ascendido, de algún modo, a un estado superior tras descubrir un Gran Axioma. Su sucesor fue Hashkar, un enano planar. Su búsqueda incansable de conocimiento lo definía, y fue una elección sencilla para liderar la facción. Aunque no era exactamente un tipo interesante, parecía que sabía todo acerca de todo, y eso era suficiente para los Jefes. Poco antes de la Guerra de las Facciones, sin embargo, se reveló que en realidad Hashkar era un suplicante, con rumores acerca de que, en vida, su creencia se centraba en la propia Sigil, y de algún modo, ¡renació como suplicante de la Ciudad de los Portales! Aunque la idea parece imposible, no es impensable considerando los hechos. Hashkar no fue enlaberintado como los demás fáctols, y hay varios rumores que afirman que tenía un trato “especial” con la Dama del Dolor. Por supuesto, nada de esto lo salvó de la espada de un Xaositecto, inflamando la enemistad natural entre las facciones del orden y del caos. El hecho de que todos los intentos de resucitar a Hashkar tras la Guerra hayan resultado infructuosos no ayudó a los Jefes a refutar los rumores. Tras este desastre, los Jefes se unieron a los “Guardianes de la Paz” durante la Guerra, capeando el caos como lo hicieron seiscientos años antes durante la Gran Convulsión. Sin embargo, cuando el polvo por fin se posó, quedó claro que ya no podían ser los guardianes de la ley en Sigil. Aunque aún disponían del conocimiento, la mayor parte de su poder se había perdido.
Tras la Guerra de las Facciones, la Fraternidad del Orden se retiró de Sigil, reuniéndose con sus compañeros en el plano de Mechanus. Un montón de debates acerca de diversos temas surgieron a continuación, alrededor de la pregunta central: “¿Qué hicimos mal?” La mayoría estuvo de acuerdo en que, si bien su estructura organizativa fue capaz de capear el caos bastante bien, aún quedaba el hecho de que todos sus planes y teorías centradas en Sigil, algunas de ellas con cientos de años de desarrollo, habían sido suspendidas indefinidamente. En poco tiempo hubo una lucha por el poder entre Jamis, una Jefa de alto rango de Sigil y sacerdotisa de Oghma; y Nancias Garabutos, la maga al cargo de la Fortaleza de la Iluminación Disciplinada. Jamis era la elección obvia para suceder a Hashkar, pero Nancias era la líder de las fuerzas de los jefes en Mechanus. Al mismo tiempo se llevó a cabo una reestructuración de la Fraternidad. “Un lugar para cada uno, y cada uno en su lugar” se convirtió en el eslogan que se repitió en discursos y charlas en aquella época. Los Matemáticos fueron reabsorbidos en la facción con la promesa de una nueva dirección en la Fraternidad del Orden.
Jamis, tras numerosos debates, fue elegida como nueva fáctol, aunque muchos nativos de Mechanus quedaron resentidos porque creen que se hizo con el puesto gracias a su presencia encantadora y al favor divino de Oghma, más que por sus capacidades intelectuales. Sin embargo, Jamis suavizó el conflicto anunciando que lideraría una expedición para crear de nuevo un refugio y una biblioteca en Sigil (y para evitar confrontaciones con Nancias). Además, la estructura de comisiones y sub-comisiones se expandió enormemente, dedicándose a estudios antes rechazados y aumentando el alcance del punto de vista de los Jefes.
Los Jefes no han olvidado Sigil; en realidad, sigue estando en sus pensamientos incluso durante su ausencia. Ya que se encuentra justo en el centro de los Planos Exteriores, los Axiomas descubiertos allí deben ser los más valiosos. Los rumores afirman que Jamis tiene en su poder algunos de los diarios de Hashkar, los cuales incluyen parte de lo oscuro sobre Sigil y la propia Dama del Dolor...
OBJETIVOS
El objetivo principal de la Fraternidad del Orden es el que siempre ha sido: reunir información y conocimiento para obtener acceso a los secretos del Multiverso. La forma de aproximarse a ese objetivo ha ido variando, pero su elemento definitorio ha permanecido inalterado durante un milenio.
Para este fin se han establecido de nuevo en Sigil para poder continuar con sus estudios. Con un acuerdo con los aasimon y modrones que dirigen Las Manos del Tiempo, un pedazo de los engranajes de Mechanus que, de algún modo, ha acabado en Sigil, han logrado acceso a una nueva fortaleza en la que continuar sus estudios. A cambio, los Jefes invierten dinero y trabajo para expandir Las Manos del Tiempo, adquiriendo nuevas parcelas de tierra para ello. Muchos jefes aún siguen trabajando para el sistema legal y burocrático de la Jaula, pero ahora sin sus insignias de facción visibles. Jamis supervisa todas estas operaciones personalmente, manteniendo todo desarrollo y crecimiento acorde a su plan.
Mantener Menasus (una capa de Arcadia que se deslizó a Mechanus) es también una prioridad para los Jefes. Desbandar a los suplicantes y enviarlos de vuelta a Arcadia es de vital importancia para Nancias, que está planeando y supervisando la operación. Desafortunadamente, los Xaositectos -y posiblemente también el Harmónium- se oponen a este plan. Pese a sus aliados modrones y a su esfuerzo en traer habitantes legales a Menasus, no parece que la capase vaya a estabilizar en un futuro próximo.
ALIADOS
Los aliados tradicionales de la Fraternidad del Orden, en los días de antaño anteriores a la Guerra de las Facciones, eran el Harmónium y los Eutanastas. Desafortunadamente, los Eutanastas se disolvieron durante la Guerra, y los eventos recientes en Menasus están dañando las relaciones de los Jefes con los Cabezones, quizá de forma irreparable.
Sin embargo, han hallado aliados en los dos grupos escindidos de los Eutanastas. Cuando necesitan guardaespaldas, contratan peña del Gremio de Escoltas, la etiqueta bajo la que operan los negocios de los Mataplastas. Por otro lado, su regreso a la Ciudad de los Portales los ha llevado a ayudar a los Hijos de la Misericordia en sus labores de mantenimiento de la paz y el orden.
ENEMIGOS
Los enemigos tradicionales de la Fraternidad del Orden son los Xaositectos, por supuesto. Su filosofía de engendrar el caos es bastante disruptiva para las actividades de los Jefes, y el hecho de que uno de los Caóticos fuese quien acabó con la vida de Hashkar, su anterior fáctol, no ayuda a mejorar las relaciones. El tiempo y la distancia han suavizado las cosas un poco, aunque seguro que tras el regreso de los jefes a Sigil la vieja enemistad se reactivará pronto.
La Liga Revolucionara tampoco siente demasiado cariño por la Fraternidad del Orden (y es mutuo), aunque con los Jefes apartados del poder, las actividades hostiles de los Anarcos contra éstos han cesado. Sin embargo, el deseo expreso de los jefes de llegar a controlarlo todo ha hecho que algunos Anarcos lleven a cabo acciones preventivas.