Bienvenidos al décimo de una serie de artículos de trasfondo sobre Planescape: se trata de la traducción del capítulo 3 del entorno de campaña de Planescape para D&D 3.5 realizado por la gente de Planewalker.es (página ya desaparecida). Comenzamos a analizar cada facción en detalle. Hoy, los Hombres de la Ceniza.
“¿Tsalak?”
El
anciano Muerto miró a su acompañante mientras el más joven cargaba
un cadáver en el carromato, pero no dijo nada.
“¿Qué
crees que hay después de la Verdadera Muerte?”-preguntó el joven
aasimar.
Tsalak
meneó la cabeza mientras maniobraba el cadáver hacia una posición
estable sobre el montón para que no se cayese cuando el carromato se
pusiese en marcha.
“Ay,
Marn. Curiosidad. Debes librarte de ella si alguna vez quieres
alcanzar la verdadera Muerte.”
“Pero,
¿qué hay después de la Verdadera Muerte? Lynia dice que renacemos
a la vida. Horkozie dice que no hay nada, que terminamos para
siempre. Raan dice...”
Tsalak
trepó a la parte frontal del carro, e hizo señales a Marn para que
subiese. “Y Tsalak dice que si pasases más tiempo intentando
librarte de tu curiosidad y de tus otras pasiones y menos tiempo
siendo indulgente contigo mismo, entonces podrás ser capaz de
alcanzar la Verdadera Muerte y descubrirlo por ti mismo.”
Mientras
Marn saltaba a la parte trasera del carromato y se colocaba en
equilibrio sobre los cadáveres, Tsalak sacudió las riendas y los
ponis arcadios comenzaron a avanzar.
“Pero...
¿Y si lo que hay después de la Verdadera Muerte es algo que no me
gusta?”
El
viejo genasí suspiró y detuvo el carro. “Marn. Mira hacia abajo.
Mira todos esos cadáveres sobre los que estás sentado. Mira a sus
caras. Mira bien.”
“¿Parecen
realizados? ¿Parece que han alcanzado la paz? ¿No? Eso es porque no
lo han hecho. Eso es porque, en el fondo, sabían que podían haber
hecho más de lo que hicieron. Nuestra creencia en la Verdadera
Muerte no es algo único de los Hombres de la ceniza, Marn. Todo el
mundo lo cree, en el fondo. Es sólo que la mayoría de los pringados
están demasiado cegados por sus pasiones para admitir esa verdad.”
“Esfuérzate
en eliminar tus pasiones, Marn. Lucha por estar preparado para la
Verdadera Muerte. Porque en el fondo sabes que es el siguiente paso
que necesitas dar. Y, porque si no, cuando mueras tu cara se parecerá
a la de ellos. Vacío. Frustrado. Y entonces tendrás que empezar
todo de nuevo. ¿De verdad quieres eso?”
Marn
no contestó, y Tsalak puso en marcha de nuevo el carromato. El
clip-clop de los cascos de los ponis hizo eco en la oscuridad.
Estoicos,
calmados, inexpresivos... su apodo de Muertos es el que mejor
describe a los Hombres de la Ceniza. Creyendo que esta vida no tiene
sentido y que en realidad todo el mundo está muerto, la peña los
considera un poco espeluznantes. Dirigen el Mortuorio en Sigil, y lo
han hecho desde siempre, desde que cualquiera tenga memoria pueda
recordar. Los Muertos tratan de eliminar sus emociones, y muchos
tienen éxito hasta el punto de que es imposible obtener una reacción
de ellos; incluso insultar o amenazar a un Muerto no lo perturba. Los
Hombres de la Ceniza creen que si un matasietes es capaz de librarse
de todas sus emociones, entonces finalmente podrán alcanzar la
Verdadera Muerte, ya que todos en el Multiverso están muertos, y la
realidad es sólo un purgatorio sombrío.
Apodos: Muertos
Cuartel general: El Mortuorio en Sigil, con puestos avanzados en el Plano de la Energía Negativa.
Principales razas: Semi-elfos, humanos, tieflings.
Principales clases: Clérigos, monjes, magos.
Fáctol: Ninguno actualmente
Miembros prominentes: Iunne (CN macho asura), Komosahl Trevant (NM macho humano Mago13 ), Oridi Malefin (N hembra tiefling Clérigo19), Silidath (NM hembra shad Maga5/Pícara5)
Alineamiento: Cualquiera, con tendencias malvadas o neutrales.
Símbolo: Un cráneo alargado visto frontalmente, con un collar de huesos, sobre un campo púrpura.
FILOSOFÍA
El
Multiverso es un lugar miserable, un ciclo interminable de muerte y
tristeza. La crueldad, la brutalidad y la avaricia son comunes a lo
largo y ancho de los planos, e incluso obligatorias en algunos
lugares. La calidad de esta “vida” es una basura. Por supuesto,
eso es porque esto no es la vida en absoluto. Es una especia de
purgatorio, y no uno muy agradable.
Los
Muertos creen que todo el mundo ya vivió y murió, y esto es lo que
hay después. La vida es alegría y celebración, pero el Multiverso
está lleno de conflictos y sufrimiento. En lugar de sentimientos
positivos hay dolor. En lugar de crecimiento, sólo hay muerte. No,
esto no puede ser la vida. Esto es una burla retorcida, una sombra de
lo que es realmente la vida.
El
único objetivo ahora es alcanzar la Verdadera Muerte y pasar más
allá de este miserable estado de existencia. ¿Y qué viene después
de la Verdadera Muerte? Bueno, eso es algo a debatir. Algunos creen
que tras la Verdadera Muerte, uno alcanza la Verdadera Vida, y tiene
una oportunidad para vivir de nuevo donde vivió por primera vez, un
lugar mucho más vibrante y real que esta sombría existencia. Otros
creen que no es la Verdadera Vida lo que hay tras la Verdadera
Muerte, si no una Vida Futura, donde la alegría y la felicidad son
lo único que existe, y el dolor no se conoce. Otros, sin embargo,
creen que tras la Verdadera Muerte aguarda el olvido, que lo que trae
es un final permanente al alma y a la consciencia. Sea lo que sea lo
que los Muertos creen que viene tras la Verdadera Muerte, todos están
de acuerdo en que es algo mejor que esto.
Eso
no significa que vayan por ahí buscando la muerte. Simplemente morir
no es suficiente, un tío tiene que prepararse adecuadamente para dar
el paso hacia lo que sea que venga tras la Verdadera Muerte. Uno
tiene que entender verdaderamente este estado de existencia, sus
pruebas y dificultades, antes de estar listo para abandonarlo. De
otro modo, probablemente acabe de vuelta aquí, y tendrá que pasar
de nuevo por este doloroso purgatorio- ¿Y no sería eso una pérdida
de tiempo? Así que en realidad los Muertos no desean morir, al menos
no hasta que estén preparados para ello; y tampoco están
interesados en acelerar la muerte de otros -si no está preparado
para la Verdadera Muerte, no tiene ningún sentido poner a un tío en
el libro. Incluso aquellos que creen que están preparados permanecen
aquí más tiempo para ayudar a otros a seguir el camino correcto.
Así, algunos Muertos encarnan una extraña mezcla de apatía y
altruismo, aunque pocos son capaces de apreciar su generosidad.
El
estoicismo es un rasgo común entre los Muertos: esto es sólo un
purgatorio, y cualquier cosa que pase aquí sólo tiene relevancia
mientras acerque a un matasietes a la Verdadera Muerte. De modo que
¿por qué preocuparse? Por lo que respecta a los sentimientos, los
Muertos no los tienen. Es común un aire de piedad distante: los
Muertos se lamentan por aquellos que no son capaces de ver la
realidad en conjunto. Pero aún así, la piedad es un sentimiento,
por lo que los Muertos más veteranos también tratan de librarse de
ella.
A
veces, sin embargo, alguno de los Muertos se vuelve demasiado
entusiasta en su lucha contra las pasiones. Esto puede parecer
contradictorio, pero el resultado es muy real: es llamado la Apatía.
Los afectados se vuelven tan desinteresados y apáticos que ni
siquiera se preocupan de comer o de otras necesidades básicas.
Tratar de eliminar las pasiones y los deseos es una cosa, pero no
preocuparse de la existencia en el día a día... bueno, eso no va a
acercar a un tío a la Verdadera Muerte. De hecho, muchos Muertos
llaman a la Apatía la “Falsa Muerte”, ya que es superficialmente
similar a la muerte, pero es algo de lo que un matasietes debe
librarse si quiere, de algún modo, avanzar. Algunos lo logran -hay
casos de Muertos recuperándose de la Apatía. Pero muchos de los que
caen presa de la apatía acaban marchitándose y muriendo, o
perdiendo el interés en alcanzar la Verdadera Muerte y uniéndose a
los Desolados.
Según
la creencia de los Hombres de la Ceniza, los primarios sólo están
comenzando la senda de la Verdadera Muerte: están demasiado
centrados tratando de vivir esta existencia como para entender el
camino de la Verdadera Muerte. Los planares conocen más acerca del
Multiverso, siendo conscientes de los procesos y fines de la muerte
aquí en el purgatorio, pero sólo algunos reconocen que es un
purgatorio, y que lo que necesitan alcanzar es la Verdadera Muerte.
Los suplicantes y los Legados están ambos en callejones sin salida,
incluso aunque se encuentren más cerca de la Verdadera Muerte que
muchos otros. Los suplicantes están centrados en fundirse con su
plano, y los Legados en servir a sus dioses, cuando ambos deberían
tratar de alcanzar la Verdadera Muerte. Quizá lo más cercano a la
Verdadera Muerte sean los no muertos. Purgados de pasiones y de apego
a la vida, poseen una pureza que pocos pueden alcanzar. Irónicamente,
los no muertos sin inteligencia están completamente vacíos de
emociones, pero su falta de intelecto les impide apreciar lo cerca
que están de la Verdadera Muerte. Los no muertos con libre albedrío,
por otro lado, deberían ser más capaces de apreciar su posición,
aunque muchos tienden a aferrarse ferozmente a la “vida” como
para estar preparados para la Verdadera Muerte.
BREVE
HISTORIA
Nadie
sabe cuándo se fundaron los Hombres de la Ceniza: han estado por
aquí desde que todo el mundo recuerda. La mayoría cree que la
facción fue fundada por Skall, el anterior fáctol, unos 600 años
antes de la Gran Convulsión, pero parece que en aquel momento
simplemente se formalizaron algunos detalles de la estructura de la
facción; los Muertos habían estado por allí de alguna forma desde
mucho antes, quizá desde hace miles de años. ¿Cómo es posible que
Skall haya estado al frente tanto tiempo? Bueno, las historias sobre
esto suelen diferir. Algunos dicen que era un poderoso hechicero
capaz de prolongar su vida indefinidamente, pero la opinión
mayoritaria es que Skall era, en realidad, un no muerto,
probablemente un lich, o quizá un vampiro. Skall sólo interactuaba
con otros Muertos mediante un conjuro de proyectar imagen, por
lo que nadie puede estar muy seguro de lo que era realmente. De
cualquier modo, tras su fundación, los Muertos han estado bastante
callados desde entonces. No suelen molestar a la gente, pese a que
sus creencias tienden a enfurecer a algunas facciones con puntos de
vista más positivos acerca del Multiverso.
Durante
la Guerra de las Facciones, los Hombres de la Ceniza perdieron el
liderazgo de Skall. Al principio, la mayoría de los Muertos
asumieron que alcanzó la Verdadera Muerte y ascendió, pero tras la
guerra, cuando se descubrió que la mayoría de los fáctols se
habían desvanecido, quedó bastante claro que probablemente Skall
hubiese compartido el destino de los otros fáctols, probablemente
desterrado a los Laberintos. Los Muertos permanecieron neutrales
durante la guerra, haciéndose cargo de los cadáveres de ambos
bandos por igual. Después de la guerra, sin embargo, los Muertos
tuvieron que hacer frente a la desaparición de Skall. Para la
mayoría de las facciones, la desaparición de su fáctol no era algo
tan grave: habían tenido muchos fáctols a lo largo de su historia,
y uno nuevo podía cumplir perfectamente el papel. Pero Skall no era
sólo el fáctol: era también el fundador y,para muchos, encarnaba
la propia facción. Parecía difícil que la facción pudiese
continuar sin él.
Y,
por un tiempo, no lo hizo. Tras la Guerra de las Facciones, los
Hombres de la Ceniza, oficialmente, se disolvieron. Individualmente,
muchos Muertos continuaron trabajando para limpiar las calles de
cadáveres, y continuaron con su creencia de que tenían que tratar
de alcanzar la Verdadera Muerte, pero no se asociaron ni mantuvieron
ningún tipo de jerarquía. No les llevó mucho tiempo darse cuenta
de que eso era una estupidez -peor aún, era una muestra de
sentimentalismo, algo de lo que los Muertos debían librarse.
Gradualmente, y oficialmente sin ningún tipo de propósito, la
facción se reunió de nuevo. Aún no han elegido un nuevo fáctol, y
es probable que nunca lo hagan, ya que funcionan muy bien sin uno.
OBJETIVOS
Los
Hombres de la Ceniza nunca han sido una facción centrada en un
objetivo. Principalmente, continúan haciendo lo que siempre han
hecho: ocuparse de los muertos y tratar de alcanzar la Verdadera
Muerte. Siempre ha habido rumores de que los Muertos tratan de
iniciar una “conversión en masa” de toda la peña hacia su forma
de pensar, pero nunca se ha probado nada.
Sin
embargo, hay unas pocas cosas que los Muertos desean hacer -bueno, no
es que lo “deseen” mucho, es sólo que lo encuentran útil para
su trabajo. Quizá la más importante sea encontrar un nuevo lugar
con suficientes portales como para servir de centro funerario, como
solía ser el Mortuorio. Se escuchó poco después de la guerra la
cruda realidad de que los Muertos le iban a comprar el Parlamento a
Harys Hatchis, pero finalmente quedó en nada; quizá decidieron que
no tenía suficientes portales, o la historia era simplemente un
rumor desde el principio. En cualquier caso, los Muertos aún no han
encontrado un edificio adecuado que sirva a sus propósitos; al
menos, uno que su dueño esté dispuesto a vender.
Hasta
el momento, los Muertos han tratado e solucionar este problema de dos
formas -y la ausencia de un liderazgo centralizado en la facción
hace que nadie pueda decir cuál de las dos formas es la preferida
oficialmente. Algunos Muertos usan los pocos portales que aún quedan
en el Mortuorio, sin preocuparse de si el cadáver llega a un plano o
a otro. Otros usan portales fuera del Mortuorio: ahora es una visión
común en las calles de Sigil ver un cortejo fúnebre de los Hombres
de la Ceniza, o un servicio funerario junto a una esquina o en una
taberna que casualmente tiene un portal hacia el plano adecuado. Y
aunque el Mortuorio no disponga actualmente de todos los portales
necesarios, sigue siendo el cuartel general de los Hombres de la
Ceniza. Tienen demasiado tiempo y esfuerzo invertido aquí como para
simplemente recoger sus cosas y mudarse. De todos modos, ¿por qué
deberían irse? Seguro, un sitio nuevo podría tener más portales,
lo cual sería conveniente, pero un deseo de conveniencia es...
bueno, ya sabes el resto.
Otra
cuestión interesante que ha surgido recientemente es la posible
reaparición de Skall. Un cierto número de Muertos han informado de
que han visto a Skall recientemente en el Mortuorio. ¿Ha escapado
Skall del Laberinto sal que fue desterrado? ¿O ha encontrado una
forma de proyectar imagen desde el Laberinto? Nadie lo tiene
claro, pero algunos están convencidos de que está de vuelta, y de
que está trabajando para preparar su regreso como fáctol. Otros,
sin embargo, no están tan seguros. No quiere decir que piensen que
todos los que dicen haber visto a Skall sean unos mentirosos o unos
lelos, por supuesto, pero... si Skall simplememnte estaba proyectando
su imagen, ¿qué impide a otro proyectar una imagen similar y
hacerse pasar por él? Sin embargo, Skall es tan importante para la
facción que todos los Muertos de alto rango creen que todos esos
informes deben ser investigados. Quizá esté realmente de vuelta;
más probablemente se trate de un impostor; pero de cualquier modo,
necesitan estar seguros.
ALIADOS
Los
Muertos no tienen ningún aliado per se: tienden a trabajar solos, y
tratan de evitar verse implicados en los problemas de una u otra
facción. En la práctica, sin embargo, se llevan mejor con unas
facciones que con otras. Comparten con la Cábala de la Desolación y
la Guardia del Destino una especie de nihilismo, y muchas veces hacen
causa común con estas dos facciones. En menor grado, los Muertos
también tienen cosas en común con los Athar y los Xaositectos, que
parece que son capaces de ver más allá del velo del significado y
el sentido que tiene esta falsa vida en la que están. También
respetan a los Jefes, los Indepes y los Crípticos, que tienen
respeto por el aprendizaje y el progreso; aunque todas esas facciones
están demasiado atadas a sus pasiones y deseos como para poder
hallar la Verdadera Muerte.
ENEMIGOS
Del
mismo modo que los Muertos no tienen verdaderos aliados, tampoco
tienen verdaderos enemigos. De todos modos, algunas facciones
mantienen un ojo vigilante sobre ellos. El Harmónium y los Hijos de
la Misericordia tienden a vigilar a los Muertos, sin interferir, pero
siempre sospechando. Los Anarcos... bueno,ellos se oponen a todo el
mundo, y los Muertos ven poco de admirable en su pasión por lo que
hacen. Los Predestinados también están demasiado centrados en sus
deseos como para comprender la filosofía de los Hombres de la
Ceniza. Los Sensibles están perdidos saboreando los supuestos
placeres de esta “vida”, y están ciegos ante el vacío y la
irrealidad de la existencia -o, según el punto de vista de los
Sensibles, los Muertos están demasiado centrados en ignorar la
belleza de la vida. Y sobre el Ojo de la Mente... bueno, no se
necesita un genio para saber que su ideal de progresión a través de
diversas encarnaciones va completamente en contra del deseo de los
Muertos de hallar la Verdadera Muerte y terminar su tiempo en este
Multiverso.
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