miércoles, 7 de noviembre de 2012

Los bonitos recuerdos del Gran Nigromante: Torneos de antaño

No sé si será la fiebre provocada por la gripe que me hace delirar, o si tendrá algo que ver la mini-liguilla de Warhammer que estamos echando en el local, pero últimamente me he estado acordando de los torneos de Warhammer, en general. En su día (cuando era un chaval, no tenía canas y mis huesos no crujían al hacer movimientos bruscos) yo participaba en torneos. Así, como lo oís. Y me apetecía hablar sobre ello, sobre todo a raíz de las cosas que me cuenta Elric, que acude asiduamente a torneos con sus asur y sus druchii.



Todavía recuerdo mi primer torneo de Warhammer: fue en las ECARES (Encuentros Cántabros Anuales de Rol, Estrategia y Simulación), organizadas por las asociaciones de rol de la zona. Me presenté con un ejército skaven (que me habían prestado: ni siquiera había jugado antes con skaven :P), con muchos guerreros skaven, campana gritona, ratas ogro y demás. Qué iluso fui. Me hice un ejército como para echar una partida amistosa, metiendo un poco de todo. Me pasaron por encima. Fueron los malditos enanos del Caos, que me inmovilizaron el centro del ejército con varios cañones estremecedores.

Aquel torneo lo ganó el ejército volador, del que ya he hablado en otras ocasiones. Hasta el ejército de  Khorne con Heinrich Kemmler de Mr. Pussy fue vapuleado (más en la discusión con los árbitros que en la mesa de juego, ya que sólo tiraron el dado para ver quién empezaba). Curioso comienzo para mi experiencia en torneos...

Desde aquella, comencé a participar más en torneos, pero con el Caos, que era mi ejército. El cambio de edición (de 4ª a 5ª) hizo que ciertos personajillos abandonasen los torneos de Warhammer por otros de otras cosas, y poco a poco las "nuevas generaciones" nos hicimos hueco. Al final, éramos todos conocidos, y sabíamos qué podíamos esperar cada uno de los demás... para bien y para mal xD

Por supuesto, he de recordar a un compañero (llamémosle "el Francés" xD) que tuvo que dejar esto del Warhammer por una conjunción de factores (trabajo, matrimonio, mudanza a otra provincia, en las tiendas de GW no le dejaban jugar con ciertas miniaturas...). Había sido un incansable jugador de Hombres bestia, y con ellos iba hasta el fin del mundo. Todavía recuerdo un torneo en unas ECARES en el que hubo prácticas muy turbias (las había con frecuencia, y no sólo a nivel de reglas, sino a nivel económico... qué curioso que muchos de los organizadores de aquello a día de hoy estén en organizaciones como el PP o el PSOE). El que hizo las reglas del torneo era un "conocido" jugador de enanos de Santander, y como no podía hacer las reglas y jugar el torneo, diseñó un ejército y se lo pasó a un amigo suyo para jugar con él. Las reglas eran muy curiosas: incluían cosas como "magos máximo nivel 3" y "sin aliados", pero "los enanos podrán incluir de aliado hasta un mago alto elfo de nivel 4". También "no se podrán incluir objetos mágicos de más de 50 puntos, excepto los enanos, que podrán incluir objetos rúnicos sin límite", y otras lindezas similares. Todo muy justo y muy lógico, claro. Pues a mi amigo "el Francés" le tocó en primera ronda contra el tipo de los enanos, y lo que hizo fue desplegar todas las unidades en una sola fila, muy ancha, para evitar lo peor de los cañonazos. Cuando llegó el organizador y vio que su amigo había perdido estrepitosamente con las reglas a su favor y el ejército diseñado para ello, se quedó anonadado xD

En aquellos torneos me encontraba también con gente de la asociación de Corrales. En particular me acuerdo mucho de Pana y sus doce carruajes de hueso, de Gonzalo y sus cinco gigantes (¿Gigante portaestandarte? ¿Gigante músico? xD) y de Alberto "el Elfo", gran jugador, gran pintor, gran modelista y mejor persona (aunque siempre me ganaba... xD). Recuerdo una partida (semifinal del torneo de Astillero, al que me escapé con otro amigo porque mi madre no me dejaba ir xD) que me enfrentó a él. Era una época en la que la magia era muy importante, y me presenté con un ejército muy "raro":

-Señor del Caos de Khorne con Espada Matamás, Armadura Protegemucho y Dragón del Caos
-Héroe de Khorne con Trituragentes en caballito del Caos
-Dos unidades de caballeros del Caos de Khorne.



Básicamente era eso: dieciocho miniaturas, 2500 puntos. El ejército sorprendió, y me colé en semifinales. Pero allí estaban esperándome los hados (y los malditos elfos xD). Tras un comienzo espectacular, mi señor del Caos en dragón y una de mis unidades de caballería (la otra había muerto) estaban a punto de cargar contra los restos de los altos elfos (una docena de arqueros y un mago). Entonces, en su fase de magia, robó la Energía Total, me lanzó un Ataque de Piedra (un hechizo que mueve una colina para aplastar cosas) y aplastó mi ejército y mis esperanzas (¿Cómo diablos se puede fallar un chequeo de iniciativa teniendo I9?).

Por último, quería hablar de otro jugador, el causante de que dejase de jugar torneos. No diré su nombre ni el lugar de donde venía, pero se llamaba César y era de Santander xD. Este tipo jugaba con Vampiros, y las dos o tres batallas en las que me enfrenté a él las recuerdo como las más insufribles de mi vida. ¿Alguna vez habéis tenido ganas de arrojar miniaturas de plomo a la cabeza de alguien? Yo tenía esa sensación siempre que lo tenía delante. Era uno de esos jugadores que hoy sería conocido como "jugador competitivo RAW", pero que en aquella época llamábamos "gilipollas" y "tramposo". Tenía, además, un amigo (o quizá un homúnculo) que le reía las gracias y le daba constantemente la razón ("El carruaje negro no es un carruaje, es el carruaje negro, y el reglamento dice que los carruajes no pueden marchar, pero no dice nada del carruaje negro, así que sí marcha"). Acabé concediéndole todas las partidas que jugamos, porque era insoportable jugar así una partida. Lo curioso era cuando, tras los torneos, los participantes echábamos partidas nocturnas de muchos contra muchos, y nadie quería que este tipo participase. Y se quejaba de que lo condenábamos al ostracismo xD

No he vuelto a jugar torneos de Warhammer desde el milenio anterior, y no creo que lo haga: por lo visto, abundan cada vez más los jugadores como el tal César, y ya no tengo edad para discutir por niñerías. Pero hay cosas que se te quedan grabadas...


6 comentarios:

  1. Ainnss, pues igual si que estás un poco mayor. XD

    Tengo muy escasa experiencia competitiva, pero he de reconocer que aunque no sean muchos, este tipo de jugadores te amarga la experiencia.

    P.D.: El carruaje negro no es un carro...es un avión. ¿Nadie se había dado cuenta?XD

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    1. Old and crippled xD

      Maldito carruaje negro, con su espectro y sus habilidades guarrunas... xD

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  2. Joder Yibrael e aprovechado para leer la otra entrada y Señor Pussy es un personaje muy peculiar xq si me enterado bn es q lo organizaba todo y se inventaba las reglas del torneo (lo de las alianzas de antaño x lo q e visto era muy chetudo) para q luego su esbirro de turno perdiera estrepitosamente como en los dibujos y encima para rematarle le infringiste un severo agravio humillando le con Halflings. Hiciste bn llendo un un ejercito variado para ir al torneo mejor ir con ese o uno un poko competitivo q ir con un culoduro y quedar marcado para siempre,lo de la colina con I9 ya es mala pata. Y lo de Cesar hay en todos los lados. Lo que no se es xq no mandasteis a la mierda al Sr Pussy y creasteis vosotros un torneo o una partidas entre colegas porque eso de participar con un "addendum" by the face parece muy turbio.

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    1. Es que en aquella época mis amigos y yo éramos unos críos de 13-14 años, y el Sr. Pussy tenía bastante más. Eso sí: con el tiempo lo acabamos haciendo, pero eso para otra entrega de "los bonitos recuerdos" :P

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  3. Caray Ybrael, parece que has retratado mi propia experiencia en torneos; simplemente cambia "Santander" por "Madrid" y "César" por "Jose Antonio", y ya está. Lo único que puedo añadir es que en mi caso, además, el árbitro era amigo suyo, y se sabía el reglamento de memoria a interpretación libre; todavía recuerdo cuando dijo que las catapultas usaban plantilla grande, que todo era impactado con fuerza doble, y que el del centro estaba muerto directamente. Sutil, muy sutil.

    Sin embargo, debo reconocer que yo sí participo aún torneos de tanto en tanto, más que nada porque ahora juego poco y tengo mono (niños, las "drogas de plomo" son malas).

    Crolador-.

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    1. ¿Alguna vez te han hecho volver con el goblin volador que acababas de disparar a la catapulta de goblins voladores de la que salió disparado para poder volver a disparar? xD

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