Han
pasado cinco años desde la descontinuación de Warhammer Fantasy
Battles. 2015 fue sin duda un punto de inflexión para nuestro amado
hobby, pero han ocurrido muchas cosas desde entonces.
A
nivel empresarial, está claro que Games Workshop no se ha
desentendido de este mundo de fantasía por completo. En aquellos
tiempos, GW realizó un esfuerzo bárbaro por promocionar su nuevo
mundo (o modelo de negocio) conocido como “Warhammer: Age of
Sigmar”. Y fue tal el interés que tenían en promocionarlo que
vieron necesario ocultar en el trastero el juego de miniaturas que
les hizo llegar a lo que son hoy en día.
No
me malinterpretéis; en aquel entonces y a día de hoy, Warhammer
40000 sigue siendo el juego de miniaturas que mantiene la empresa a
flote. Sin embargo Warhammer Fantasy representaba “apenas” un
10-15% de sus beneficios totales. Y lo digo entre comillas porque, si
no recuerdo mal, la venta de Marines -y solo marines de los diversos
capítulos- representaba aproximadamente el 35-40% en aquella época.
Es decir, una pequeña parte de WH40K triplicaba el volumen de ventas
de WHFB al completo. Pero otra prueba de esto son los medidores de
“hype” que realizan con cada pequeño fragmento que muestran
sobre “Warhammer: The Old World”, un proyecto que según ellos
les tomará años realizar pese a tenerlo todo hecho.
A
nivel de comunidad es más complicado de analizar, pues cada cual
tendrá una percepción de lo que ocurrió entonces y de lo que ha
pasado hasta ahora. Pero un hecho indudable es que esta comunidad se
ha disgregado a niveles que yo al menos no imaginaba. Personalmente
no lo veo como algo negativo ni mucho menos, pero entiendo que a los
más nostálgicos se les caiga una lagrimilla al echar la vista atrás
y hacer ciertas comparaciones. A fin de cuentas la nostalgia nos hace recordar tiempos más felices al tiempo que nos cierra la puerta a nuevas experiencias. Y todo porque alguien decidió apagar
el foco que iluminaba un juego emblemático con más de treinta años
de historia y que unió a miles de jugadores por todo el planeta.
A
los pocos meses de recibir la noticia y sin un centro de atención
como lo era la propia GW cada jugador fue víctima de su propio
enfoque sobre el juego, haciendo que nuestras múltiples diferencias
brillaran con luz propia. La gran mayoría decidió refugiarse en su
edición favorita, o empezó a jugar a otros juegos como Kings of
War, The Ninth Age y Age of Sigmar, o simplemente dejó de jugar y
vendió sus ejércitos o los guardó en el trastero. Por otra parte,
solo un par de locos (Endakil y Yibrael) se pusieron manos a la obra
para configurar un sistema propio con el que seguir jugando, y tan
solo hubo una persona que le prendió fuego a su ejército de Elfos Oscuros; puede que no tenga relevancia alguna en la
estadística, pero me pareció tan insólito que no pierdo la
oportunidad de recordarlo.
Tomaré
como referencia el tiempo que duró la octava edición de Fantasy al
decir que la jugada no les salió como esperaban. La que fuera la
edición pensada para vender más miniaturas que los jugadores
veteranos no necesitaban no cumplió su objetivo, no al menos como
ellos pensaban. Y es que el mayor de los defectos de los que adolece
esta edición es que apesta a mercadotecnia por doquier, tanto a
nivel de reglas como en el trasfondo desarrollado durante esa época.
Y es que una cosa va de la mano de la otra si, de repente, se
pretenden introducir nuevas unidades al mismo tiempo que se genera la
forzada necesidad de adquirir más regimientos de los ya existentes.
En primer lugar porque requiere un esfuerzo adicional el lograr que
ambos conceptos encajen, y en segundo porque no todos los jugadores
lo van a aceptar.
De
todas formas hemos visto que nuestra vieja amada está lejos de
desaparecer por completo. Lo hemos visto continuamente gracias a
juegos como Blood Bowl y la cuarta edición de Warhammer Fantasy
Roleplay, de videojuegos como los “Total War: Warhammer”, o con
los avances de “The Old World”. Son juegos que siguen
desarrollando este mundo de fantasía, pero no lo hacen al mismo
ritmo del que fue el juego de grandes batallas de miniaturas. A fin
de cuentas no es la propia GW quien ha desarrollado todos estos
juegos. Es decir, que si Warhammer Fantasy sigue existiendo ha sido
gracias a poner esta labor en manos de terceros, y al sector de la
comunidad que no se dejó arrastrar por las decisiones empresariales.
Aunque no forme parte de los contratos legales, ha sido la propia
comunidad la que más se ha esforzado en mantener con vida este
mundillo.
Quienes
no hemos dejado de disfrutar de este mundo de fantasía hemos
demostrado una y otra vez que la comunidad sigue manteniendo con vida
este juego. Claro está, Warhammer Reforged no es una edición
oficial y a mucha gente le repele el hecho de que sea un sistema
desarrollado por fans. Yo prefiero darle la vuelta a ese argumento y
decir que es precisamente porque es un juego desarrollado por su
fanaticada la razón de que refleje mucho mejor sus peculiaridades.
En
Warhammer Reforged esto es así principalmente por dos razones:
porque no existe la necesidad de vender miniaturas a sus jugadores
(por lo que cada cual juega con lo que le gusta de verdad) y porque
quien se toma la molestia de desarrollar un sistema propio -además
de todos sus ejércitos- indica que hay una pasión genuina en torno
al juego y lo que representa. No es por nada, pero hay que demostrar
un conocimiento inmenso tanto de las distintas ediciones oficiales
como de su entorno de fantasía para realizar algo así. Es una labor
que Warhammer Reforged ha hecho y está haciendo, semana a semana,
mes tras mes, año tras año.
Ya
he comentado en otras ocasiones que no es tan complicado parchear los
agujeros de una edición concreta o lo enormemente fácil que es
descargarse los antiguos fondos oficiales y copiar lo que hacen otros para
usarlo como si fueran ideas propias. Es normal que quienes se dejan
impresionar por una maquetación de libros a todo color se fije más
en estos detalles que en el trabajo que de verdad importa, porque no
son pocos los que son más influenciados por la manera de decir algo
que el propio mensaje, le pese a quien le pese leer estas palabras.
Nosotros sin embargo optamos por el camino más difícil, y a la vez
el más satisfactorio. Pues a día de hoy no hay otra iniciativa fan-made en el mundo que haya valorado TODO el setting de Warhammer Fantasy -desde los distintos sistemas a todo el trasfondo presente en sus diversos juegos- para elaborar una edición propia, de los jugadores para los jugadores.
Y
sé que en cierto sentido, a muchos les da igual lo que digamos o lo
que hagamos. Da igual que el Reforged Team se haya esforzado en
rescatar y dar una forma cohesionada a todos los ejércitos que
existieron. Da igual que hayamos sacado más de ochenta suplementos
ExtraReforged con los que ampliar la variedad de opciones que
existían. Da igual que hayamos trabajado codo con codo con La Biblioteca del Viejo Mundo para realizar toda esta labor en base al
trasfondo de Fantasy. Y da igual que nos pasásemos todo el año 2019
escuchando a la comunidad para pulir todos estos aspectos y lanzar la tercera edición de Reforged. Da igual,
porque entendemos que Reforged no va a gustar a todo el mundo.
Pero
claro, ahora puedes pensar que me es muy fácil decir estas cosas por
ser el encargado de las relaciones públicas de la iniciativa. Es por
eso que prefiero que sea la propia comunidad quien diga lo que ha logrado Reforged y sin pelos en la lengua:
“Warhammer
Reforged es el retorno de aquel juego que nos dio tantas tardes de
diversión antaño. Es una vuelta a darle importancia al trasfondo y
darle ese toque único a cada facción. En ese sentido es más
parecido a la 5ª edición, con una revisión de reglas cogiendo lo
mejor de 5ª, 6ª, 7ª y 8ª edición. ¿Es perfecta? En un juego de
esta magnitud, la perfección es imposible. Pero sí que puedo decir
que es la única edición fanmade que permite sentir cada facción
como si estuvieras en una novela.” - Miguel.
“Ha
recogido un montón de gente a lo largo de muchos años de afición y
ha juntado a esa gente con un juego divertido y vivo. Para quienes
nos gusta JUGAR. Y pasarlo bien recreando con ejércitos en miniatura
de un mundo fantástico todo lo que se nos ocurra. Extendiendo además
el mundo y considerando todas las opciones sin dejar de ser fiel y
“realista”. Poder jugar con Middenheim, desde sexta no podía.
Como yo cientos, con sus listas o unidades. Hasta hay una lista Halfling y
especiales del Día de los Inocentes, es la hostia. En Reforged hay
sitio para todos. La única pena de Reforged es estar tan lejos de
algunos y no poder explorar el hobby juntos.” - Noé.
“Reforged
me ha introducido a Fantasy, me ha dado “Síndrome de Diógenes”
en conversionar y completar ejércitos, los extras me parecen una
idea sublime, me ha acercado a una comunidad entera. Y joder, hasta
me hicieron caso con las diablillas de F4. A mí por lo menos me ha
dado algo que lo puedo llamar una buena etapa de mi vida.” - Pol G.
“Quiero
decir ahora aquí y en publico, ya que nos estamos chupando las
pollas, que esta es la mejor comunidad de wargames que he conocido
nunca. Sin discusiones absurdas, sin gurús ni expertos, discusión
desde el respeto, memes por doquier y nadie se ofende... todo es
positivo. Y esto ni en comunidades de rol, ni de Warhammer Fantasy,
40K, Kill Team, Malifaux o Blood Bowl me lo he encontrado.” Beorn.
“Lo
mejor de Reforged: eh chicos, discusión de reglas. En cualquier otro
reglamento, horas y horas de discusión porque al final el diseñador
no esta y es todo hablar de paja. Reforged: Yibrarel, procede a
sacarse el miembro y golpea la mesa al grito de “¡se hace así!”
y fuera bromas, esto es la hostia. Lo que mas me gusta de Reforged:
el libro de ejercito de No Muertos. Porque para jugar Imperio puedo
jugar con otras ediciones pero con No Muertos, no. Pregunto a sus
diseñadores y ellos responden.” - Aitor.
"Pues a mí me gusta Reforged por lo que NO tiene: No tiene una comunidad culodura y tóxica a la que solo le importa ganar por encima de todo lo demás. No tiene chanchullos con marcas de miniaturas alternativas que modifiquen las reglas de los ejércitos en función de sus ventas ni tiene gente entre sus filas que cobre por su labor. No tiene la morralla de hábitos que envenenaron Fantasy durante sus últimos años y haciendo que diera por culo ir a torneos en los que todos iban a machete con las mismas listas." - Elric de Melniboné
“Reforged
me ha permitido retomar el hobby que era una de las ilusiones de mi
vida. He jugado a todas las ediciones desde 5@ y me parece la versión
mas completa, equilibrada, fiel, inmersiva y realista que ha habido.
Y ademas tiene una comunidad 10/10 y un equipo activo e implicado que
va sacando material. Sinceramente, no se qué se puede mejorar. Lo
mejor es quitar las bajas de atrás. Ahora yo siento que sí puedo
jugar. Tengo hobby para años a la vista.” - Dani C.
“Para
mí es la mejor edición de Warhammer jamás hecha, y me gustaría
profundizar en el tema competitivo: jugué en 5ª, 6ª y 7ª y lo
dejé a principios de 8ª porque para mí dejo de estar balanceado.
Reforged engloba todo lo bueno de Warhammer y gracias a eso he vuelto
a jugar. Me gusta la igualdad entre ejércitos, discurrir las listas
y las estrategias para poder ganar y no veo ejércitos imbatibles.
Recordemos que GW también trabajó en el balanceo de ejércitos pues
se jugaban muchos torneos y había mucha competitividad hasta que se
les fue de las manos. Este es mi parecer, es lo que opinamos mi
hermano y yo, que estamos siempre pegándonos entre nosotros con
todos nuestros ejércitos y nunca hay un claro ganador” - Adrián
y Ángel “Castañeda”
“Seré
conciso: Me encanta que Reforged me permita hacer ejércitos
tematizados, Middenheim, Khorne, Kurgans, etc. Me encanta poder tener
grandes personajes que sean lo que deben ser: grandes guerreros o
magos. No me gusta que la comunidad estigmatice a los que hacen
listas jugonas por muy temáticas que sean. Me gusta que adapten las
ultimas unidades a Reforged. Hay cosas que cambiaría, como todo el
mundo, pero Reforged me permite jugar tanto competitivo como
temático. Y me encanta la dedicación del Reforged Team en hacer que
este hobby siga vivo. Felicidades. - Ulric.
“A
mi lo que más me gusta es que ofrece muchas posibilidades. Hay tanta
variedad y combinaciones que es muy difícil jugar contra las mismas
listas” - Grondcirth.
“Desde
que tenía 10 años llevo dándole caña al Warhammer... seguir
tirando dados en reforged simplemente me sigue dando la vida. Seguid
así chavales” - Ángel L.G.P.
"Si
no es Warhammer Fantasy oficial, al menos es como debería haber
sido. Simplifica cuando debe y cuando no, es en mi opinión más
«realista» que cualquier otra versión". - Manu J.
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¿Qué mas se puede decir? Pienso que bien poco. Repito, entendemos que Warhammer Reforged no tiene por qué gustarle a todo el mundo, pero si te gusta Warhammer de verdad y a día de hoy no le das una oportunidad, es porque no quieres. Gracias por leer hasta el final.