De entre toda la enorme variedad de setas y hongos que utilizan los goblins, hay dos tipos que merecen una mención individual, puesto que ambas se encuentran representadas en el juego, y creo que son la piedra angular de su cultura: se trata de los Hongoz Zombrero Loko y de las Zetaz Mágikaz. En este primer artículo, voy a hablar de los Hongoz Zombrero Loko.
Los Hongoz Zombrero Loko son recolectados por los chamanes goblin nocturnos para preparar una pócima que dan a los Fanáticos. El bebedizo a base de hongos otorga a quien lo bebe una fuerza prodigiosa, resistencia a la fatiga e insensibilidad al dolor, trastornando temporalmente al goblin que lo toma en el proceso, el cual gira y gira como una peonza, sin saber muy bien a dónde va. En batalla se arma a los fanáticos con enormes bolas con cadena y se los lanza girando contra el enemigo mientras este se aproxima, causando una gran devastación. El infortunado suele morir en poco tiempo, por el esfuerzo, porque se estrangula accidentalmente con su propia cadena o porque lo matan a tiros sus enemigos.
Hay quien podría pensar que son una curiosa invención de fantasía, una ocurrencia del gran Rick Priestley para añadir humor y un esqueleto de lógica a la sociedad de los Goblins Nocturnos. Pero, curiosamente, el hongo existe en nuestro mundo...
Los Hongoz Zombrero Loko son realmente la seta conocida como Amanita Muscaria. Puede parecer una afirmación extraña, sobre todo teniendo en cuenta el folklore popular acerca de tan llamativa seta, pero si profundizamos un poco en el estudio de la Amanita Muscaria nos encontramos con que no sólo está indisolublemente unida a la esencia de los Goblins Nocturnos de Warhammer, sino que también es parte íntegra de la historia de la raza humana. Aquí la información sobre la Amanita Muscaria: juzgad por vosotros mismos si se trata del mismo hongo del que hablan los manuales de Warhammer (y plantearos si Priestley los tomó en su momento...). Dejo al final unas notas de consulta para quien desee ampliar la información.
Hemos bebido soma, nos hemos vuelto inmortales, hemos alcanzado la luz, hemos hallado a los dioses.
¿Qué puede hacer ahora el enemigo para perjudicarnos y qué malicia pueden tramar los mortales?
Expande, ¡oh Soma! nuestras vidas con el fin de vivir.
Estas espléndidas aguas conceden mucho, protegen.
Como el fuego producido por fricción, ¡que las aguas nos enciendan!
¡Que nos ayuden a trascender nuestra visión y aumentar nuestro bienestar!
Rig Vedá 8.48.3
El hongo conocido como Amanita Muscaria podía considerarse el arquetipo de seta de los cuentos infantiles: pie blanco y sombrerillo rojo con motas blancas. En los mitos y leyendas de muchas culturas aparecen como hogares de gnomos y duendes, y es que pueden encontrarse ejemplares de esta especie por prácticamente todo el hemisferio norte, asociados a las raíces de casi cualquier tipo de árbol (ecología micorriza, es decir, en simbiosis con las raíces de un vegetal, árboles en este caso). Brotan durante el verano y el otoño. En la actualidad el saber popular la considera incomestible y tóxica, y aunque es cierto que no es tan suculenta como su prima Amanita Caesarea,tampoco es mortal como su otra prima, Amanita Phalloides. El hecho de su toxicidad es una verdad parcial. Como dijo Paracelso, el veneno es la dosis.
Farmacología
La Amanita Muscaria en sus cinco variedades conocidas (desde amarillas hasta naranjas) contiene amanitina, el alcaloide mortal común a toda la especie, que produce parada respiratoria y muerte en pocas horas. Pero contiene cantidades muy pequeñas de esta sustancia. Para alcanzar la dosis letal es necesario ingerir más de cinco mil gramos de seta seca, una cantidad que prácticamente ningún estómago puede tolerar. La muscaria también contiene muscarina, muscimol y ácido iboténico. La muscarina puede causar náuseas, accesos de vómito, irritación gástrica, esofágica e intestinal con dolor intenso y también diarrea. Esta desagradable sustancia se degrada con el secado de la seta. El secado también degrada el ácido iboténico en muscimol, el verdadero componente psicoactivo del hongo. El muscimol es una sustancia bastante extraña, ya que abandona el cuerpo tal y como entró en él, sin sufrir cambios químicos. Existe una controversia respecto a cómo considerar el muscimol, ya que farmacológicamente causa efectos comunes a fenetilaminas, triptaminas y tropanos, no pertenece químicamente a ninguna de estas tres familias de alcaloides, y neurológicamente actúa como agonista en los receptores del ácido gamma-amino-butírico (GABA), del mismo modo que el alcohol etílico, tan presente como embriagante en la cultura occidental.
La Amanita Muscaria en el pasado
Existen evidencias del uso de Amanita Muscaria como embriagante desde hace miles de años: en el noroeste de Siberia el arqueólogo N.N. Dikov ha hallado petroglifos donde aparecen figuras humanas con hongos en sus cabezas, que datan de entre el año 1000 y 2000 a.E.C.(1) Otra muestra es el lenguaje urálico, que se dividió hace unos 6000 años en dos ramas, y ambos contienen la raíz “pang-“, que sirve de nombre a la muscaria y además significa ebrio. (2) Diversos pueblos del norte de Europa, Asia y América continúan usando la muscaria como embriagante ritual con intermediación de chamanes, para ponerse en contacto con espíritus, o para sanarse, y otros como embriagante lúdico. En nuestro continente sólo los lapones continúan usándola, asentados en el norte de Escandinavia y la península de Kola. En Norteamérica los indios chippewa y dogrib utilizan el hongo en sus rituales. En el norte de Asia varias tribus continúan usándolo: los kamchadales y los koriak, de la zona de la península de Kamchatka; los chukchi o chucotos de la zona de chukotka, al este de Siberia (donde se encontraron los petroglifos antes mencionados); los khanti de la zona de khantia- mansia, al sureste de los montes Urales; y los vogules iukaguir y zirianos iukaguir, de los Urales.
La amanita muscaria ha sido utilizada por estos pueblos medicinalmente para combatir la artritis, la fatiga psicofísica, las mordeduras de serpiente y como analgésico. Eleva la temperatura corporal y actúa como euforizante, así que también ha sido usada para combatir el frío y para realizar tareas físicas. También interviene un papel fundamental en la religiosidad de estas tribus, ya que en dosis suficientes provoca efectos enteogénicos y alucinógenos, incluyendo distorsiones visuales, desde leves deformaciones hasta cambios bruscos en la composición de la realidad, macropsia y micropsia, y fosfenos. Todos estos efectos conducen a esas personas, normalmente por mediación de un chamán o brujo, a una experiencia trascendental de encuentro con lo divino, una constatación de las leyendas que llevaba escuchando desde niño.
La bioquímica de la muscaria explica dos costumbres de estos pueblos: el hecho de que invariablemente consumen las setas secas y nunca frescas, disminuyendo así los efectos negativos sobre el sistema digestivo; y también el método de la ingesta de orina. Entre los koriak de la península de Kamchatka, los ricos hacen acopio de muscaria, la secan y la hierven en agua en sus cabañas para tomarla. Los pobres aguardan fuera de estas cabañas a que alguno de sus ocupantes salga a orinar, recogen esa orina en cuencos y la beben. (3) La orina de un intoxicado por Amanita Muscaria contiene todavía gran cantidad de muscimol, con lo que los pobres también pueden embriagarse. En la mayoría de los usos espirituales de la seta por los pueblos siberianos, normalmente es el chamán el que toma los hongos (en ocasiones cantidades absurdas) y los fieles más tarde beben su orina. Los chippewa y dogrib americanos acostumbran a dar de comer muscaria a los alces y otros herbívoros y beber su orina después, aunque en muchos casos no es necesario dar la seta al animal, ya que gran cantidad de alces, renos, ciervos, ovejas, cabras, caballos, asnos, vacas y otros animales similares son muy aficionados a consumir este hongo para embriagarse.
(Estructura química del Muscimol)
Amanita Muscaria en el mediterráneo occidental
El etnomicólogo y etnobotánico italiano Giorgio Samorini ha encontrado documentos de más de doscientas representaciones de hongos en iglesias del Medievo de Italia y del sur de Francia, sobre todo de la alta Edad Media, y ha llegado a encontrar cuarenta que aún existen (4). En España, el antropólogo y psicólogo José María Fericglá ha encontrado varias iglesias catalanas y de los valles pirenaicos en las que perviven aún representaciones de setas (5), llamando especialmente la atención una iglesia románica (siglo XII) en la que aparecen los hongos sobre el árbol de la ciencia, entre Adán y Eva, en un fresco.(6) En Cataluña pervive aún la expresión “tocat del bolet”, es decir, tocado por el hongo, que se utiliza como sinónimo de loco con tono familiar, incluso cariñoso; por ejemplo, para referirse a alguien enamorado o a un soñador. Según Fericglá, esta expresión proviene de un tiempo en el que se consumía Amanita Muscaria en Cataluña. En toda Europa occidental existen leyendas acerca de duendes, gnomos, trentis o similares, casi siempre caracterizados como enanos de gorro rojo puntiagudo y espesa barba blanca, que normalmente viven en setas como la Amanita Muscaria. Esas visiones de gnomos pueden corresponderse a la visión de la propia muscaria estando intoxicado por ésta: el sombrerillo sería el gorro rojo y el pie blanco, la barba. Fericglá y Samorini sostienen que el hecho de que se considere venenosa una seta de la que hay que consumir cantidades exageradas para que resulte mortal corresponde al cristianismo, y a su lucha por eliminar los residuos del paganismo sobre todo durante la alta Edad Media; la muscaria era utilizada por los druidas o chamanes paganos para sus ceremonias, y como medio de mostrar a los creyentes el “poder divino” por medio de alteraciones en la percepción, es decir, hacer creer que podía ejercer algún tipo de poder mágico y que estaba, de algún modo, en contacto con los dioses. Los sacerdotes cristianos fueron extendiendo el rumor de que la seta era venenosa, y ese rumor continúa hasta nuestros días.
(Muscarias secas para su consumo)
El Soma hindú
El Rig Vedá (Alabanza de la Verdad) es un antiguo texto sagrado hindú escrito en sánscrito, se estima que entre el 1100 y el 500 a.E.C. Es una recopilación de himnos sagrados dedicados a una tríada de dioses: Agní (el fuego del sacrificio), Indra (un dios heroico similar al Horus egipcio) y Soma (una poción mágica, o la planta a partir de la cual se fabricaba). El Rig Vedá está dividido en diez libros o mandalas, y el noveno (114 himnos) se dedica por entero al Soma Pavamana (el Soma Purificado). La búsqueda de la planta con la que se elaboraba esta poción, de propiedades visionarias y enteogénicas según los textos del Rig Vedá, ha ocupado a varios etnobotánicos y etnomicólogos, postulando que la bebida podía contener Ephaedra Vulgaris (fuente de efedrina y pseudoefedrina, ambas fenetilaminas de la familia de las anfetaminas con efectos estimulantes), Peganum Harmala (fuente de harmalina, una IMAO, por sí sola o combinada con alguna fuente de DMT) o Cannabis Sativa var. Indica (Cáñamo indio, famoso por su potencia narcótica). El etnomicólogo Robert Gordon Wasson estudió durante la década de los sesenta el Rig Veda y las tradiciones hindúes, así como las diversas plantas y hongos de la zona. Llegó a la conclusión de que la planta misteriosa con la que se preparaba el soma era la Amanita Muscaria, basándose en las siguientes evidencias: (7)
-No se hace referencia a semillas, flores, hojas, frutos o raíces, sino a tallo y sombrero.
-Las referencias cromáticas coinciden: el rojo brillante del sombrero, el blanco del tallo y el dorado de su jugo una vez prensado el hongo.
-No era una bebida fermentada, pues el Soma se preparaba durante la ceremonia.
-El valle del Indo es un hábitat común para la Amanita Muscaria.
-Hay una línea del Rig Vedá en la que se hace referencia a los sacerdotes orinando el soma, y el muscimol es de las pocas sustancias que no sufren cambios al pasar por el organismo.
Wasson afirmaba que el Soma consistía en el jugo que suelta la muscaria al prensarla, y que la teogonía hindú proviene del uso de este hongo para contactar con las “divinidades”, por mediación de sacerdotes que controlaban la administración de la seta. A medida que los pobladores del valle del Indo fueron desplazándose hacia el sureste, se fue perdiendo el conocimiento de la muscaria, pues estas tierras carecen de bosques adecuados para que se pueda dar la Amanita Muscaria.
(1) Malpica, Karina. Las drogas tal cual, 1999.
(2) Idem
(3) Fericglá, Jose M. El hongo y la génesis de las culturas. La Liebre de Marzo, Barcelona, 2008
(4) Samorini, Giorgio. Los alucinógenos en el mito. La Liebre de Marzo, Barcelona, 2001
(5) Fericglá, Jose M. El hongo y la génesis de las culturas. La Liebre de Marzo, Barcelona, 2008
(6) Piñeiro, Juan José. Psiconautas: exploradores de la conciencia. La Liebre de Marzo, Barcelona,
2000.
(7) Wasson, Robert Gordon. Soma: the divine mushroom of inmortality. 1972
Oh, Oh, Oh, Yibrael, si no te importa te hare un par de apuntes sobre la Amanita Muscaria en particular y sobre las setas alucinogenas en general (Y voy sospechando que las Zetas Magicaz de las que vas a hablar proximamente son las psilocybe cubensis ¿No es asi?) Ya que este tema lo tenia en cuenta hace bastante tiempo y me ha alegrado muchisimo que alguien hiciera una incision asi y tan documentada.
ResponderEliminarPor un lado, algo que no mencionas es que (Y de donde me imagino que se saco esencialmente el concepto de fanatico goblin) Los berserkers vikingos, que solian ser personas con una tara psiquica concreta como la esquizofrenia por ejemplo, tomaban una combinacion de cerveza de beleno negro (O era beleño? no me acuerdo muy bien xD) Y polvo de amanita (Vamos, una amanita secada y pulverizada) Que les ayudaba a potenciar sus "habilidades".
Era famoso su salvajismo y falta de autopreservacion hasta tal punto que corria la creencia entre la gente de los pueblos costeros de inglaterra a los que atormentaban los vikingos con sus incursiones, que los que les atacaban eran !Hombres lobo¡ (Si si, acordaos de la helice canis de los lobos espaciales xD)
La berserkers (Que tradicionalmente estaban protegidos por Odin) Se mantenian alejados "prudencialmente" del resto de su gente en tiempos de paz por su carpater psicotico y violento, pero eran temidos y respetados (¿No os recuerdo esto a los orkos chifladoz del 40k?)
Todo esto sobre los berserkers de lo que hablo proviene de estudios historicos sobre "sus personas", no te vayas a creer que estoy tratando un tema de fantasia ni mucho menos.
De hecho los berserkers fueron desapareciendo con el tiempo debido entre otras cosas a que los misioneros cristianos los tildaban de poseidos por el demonio e instigaban su persecucion (Recordemos que las quemas de brujas solian cebarse en personas con alguna tara psiquica o que padeciesen convulsiones o cosas por el estilo por epilepsia y otras enfermedades)
Vale, este tochaco iva sobre la relacion con los bersekers, que se lanzaban como locos al ataque casi desnudos o vistiendo una piel de oso, mordiendo sus escudos y agitandose y haciendo piruetas incomprensibles con sus armas.
Vale, ahora apuntar que la Amanita Muscaria (La he consumido en una ocasion xD) SI puede ser muy peligrosa, incluso si la dosis es adecuada: esto es si se seca mal, cosa que alguien que nunca haya consumido practicamente ni apreciara, asi que ojito los aventureros de los monguis.
Por otro lado el viaje no siempre es igual ni mucho menos, ni con las muscarias ni con otras setas alucinogenas, depende en gran medida del estado animico que la consume, si estas contento exacerbara tu felicidad por ejemplo, todo depende de los sentimientos que tengas en el momento del consumo (Y a lo largo de los 30-45 minutos que tardan en hacer efecto) A menudo el viaje puede devenir en una turbulenta pesadilla estando despierto o en un acceso de rabia (Cosa que no he tenido la desgracia de experimentar ni de primera ni de segunda mano)
Un saludo! Y cuando quieras ya sabes, nos vamos al bosque con unas cestitas xDD
Sobre lo de los Berserk... sí, conozco el asunto, pero no lo incluí en el artículo porque no es seguro que el ingrediente psicoactivo fuese la Amanita Muscaria: podría ser, ya que crece por la zona, pero el beleño ya es psicoactivo de por sí (contiene atropina y escopolamina), y se cree que otros ingredientes pudieran ser cosas como Estramonio o Mandrágora; los efectos de los tropanos son más similares al "estado berserk". No lo incluí porque los estudios al respecto no son muy concluyentes, pero podía ser Muscaria.
ResponderEliminarPues sí, el próximo artículo va a tratar sobre los hongos psilocíbicos (no solo psilocybe cubensis; hay centenares de hongos psilocíbicos por el mundo-ya solo en España crecen 3 variedades: Psilocybe Hispánica, Psylocibe Gallaeciae y Psylocybe Semilanceata).
De todos modos, el material de este post es una parte de un trabajo sobre "estas cosas" (xD) para Filosofía de la Naturaleza hace unos años. Si quieres echarle un ojo, lo tienes en:
http://es.scribd.com/doc/20988393/Los-biocatalizadores-divinos
Encantado de ir al monte a setas xD
jajajaja veo que eres todo un entendido, encantado de leer tu trabajo, estas cosas desde siempre me han llamado muchisimo la atencion.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de los berserkers ya me extrañaba a mi que no hubieras leido algo con todo lo que habias escrito, ciertamente no hay nada concluyente, pero bueno, como tu mismo dices es porque hay donde elegir xD
Lo de la variedad cubensis la cite mas que nada porque es la que mejor conozco, por ejemplo no tenia ni idea de que en españa hubiera ninguna especie O.o
Saludos! A ver si me termino de leer tus entradas sobre Nagash... >.<
Ojito con las setas.. a mi con las cubensis me han dado ya dos chungos muy serios... tanto que el ultimo que me dio (hace ya unos años) dije que no las tomaria nunca mas.. A parte note como un cambio constante en mi cerebro hasta meses o incluso años despues de haberlas tomado.. asi que lo dicho cuidadin con ellas si las tomais.. sobre todo hay que estar con gente de confianza, tranquilo y sin nada malo en la mente para disfrutarlas, aunque siempre hay riesgos..Buen articulo, saludos
ResponderEliminarMis experiencias con las setas han sido peliagudas, pues una vez te causan un "mal viaje" las empiezas a ver con el respeto que merecen. Sin embargo, la vida es dualidad, blanco y negro, buenas y malas sensaciones y TODA experiencia es buena si sales vivo de ella y te sirve para aprender. Como dices, es muy importante el dónde y con quién tomarlas, pero la fuente de todo mal está en la cabeza y ellas pueden sacar las cosas desagradables a flote, pero... ¿acaso es siempre algo malo? ;)
EliminarUn saludo.