jueves, 19 de mayo de 2016

Obsolescencia desprogramada

Publico hoy esta entrada mientras hago un desprecio total de las instalaciones públicas y realizando un uso indebido del equipo de los servicios públicos de empleo. Es decir, publico esto mientras estoy en clase, supuestamente. El motivo de esta entrada es la de hacer un homenaje a mi ordenador, que está estropeado desde hace unos días. Y es que no es un ordenador cualquiera. 

Foto de internet del modelo de ordenador que tengo, más limpio, más curvo y con menos teclas

Este modelo de ordenador que tiene ya la friolera de dieciséis años ha sido un pilar de la Biblioteca, el instrumento de la condenación para los mortales que siguen nuestros pasos... y para nosotros mismos. Con este ordenador se han llevado a cabo la gran mayoría de las casi 1300 entradas de este blog. Yibrael y un servidor hemos machacado sus teclas hasta la saciedad; sobre todo Yibrael, que golpea las teclas con tanta fuerza que cada vez que termina una entrada suena "Finish him!" y cada vez que borra algo suena "Co-co-co-co-combo breaker!". Hace tiempo que dicho ordenador pasó a mis manos, y ha sido un compañero inseparable para realizar mis labores. Sigue funcionando con un Ubuntu 10.04 a una velocidad más que respetable, y pese a que no tenga webcam, que tire con 500mb de memoria RAM, que se caliente hasta el punto de que al ventilador le va a pegar un infarto el día menos pensado, que la mitad de la pantalla se vuelva de color rojo quemado, que la batería dure menos de 15 minutos, que los altavoces sólamente reproduzcan cacofonías al estilo de Iker Jiménez, que la placa del ratón no funcione y que me pegue alguna descarga de electricidad estática que otra, es mi ordenador. 

No es la primera vez que la Biblioteca hace una mención al susodicho portátil. Hace ya unos días que la pantalla se comporta como la "glich" de la peli de "Rompe, Ralph". Pero Ragnor asegura que tiene arreglo, y por consiguiente llevará arreglo. Tal vez me sería posible renovarlo por otro modelo con un pequeño desembolso. Sencillamente, me niego. Ya no por el cariño que tengo por ese trasto ni por falta de dinero, sino porque dudo mucho que un ordenador de hoy en día vaya a durar tanto como lo ha hecho éste; dieciséis años, que se dice pronto. Por fortuna y como ya lo veía venir tengo todo guardado en mi disco duro, por lo que seguiré con mis entradas habituales en cuanto me sea posible.

Y alguno pensaréis, "¿no deberías estar atendiendo en clase y haciendo un uso debido de los fondos públicos en lugar de perder el tiempo y escribir chorradas como ésta?" Mi respuesta es: no, debería estar protagonizando mi propia versión de "Un día de furia". A mi izquierda, la profesora habla de sus trifulcas personales con la administración pública. Frente a mí, una secretaria que pasaba por aquí le pega de collejones a un compañero por el hecho de que tiene una nuca superlativa. Y a mi derecha, unas compañeras han sacado todo un kit de chapa y pintura y se están maquillando al más puro estilo de "Avon llama". Luego hay quien se extraña de que esté como una regadera. Me aburro. Me aburro como un burro al que zurro en el curro cuando me escurro y despachurro mientras discurro sobre cómo me aburro.

¡Pronto volvemos!

14 comentarios:

  1. 16 años? Manufactura soviética por lo menos. Los míos duran una media de 4 o 5 años, así que sí, es todo un tesoro.
    En cuando a los problemas técnicos del Niño Borracho, mientras el aburrimiento se invierta en escribir entradas, es tiempo bien invertido :P Por cierto hace tiempo que no le dais a 'Leyendas de Warhammer'una de mis secciones preferidas, a ver si os animáis!
    Un saludo

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    1. No puedo negar que salió bueno. De vez en cuando le pegan achaques propios de la edad, hay que pasarle la revisión de los 50.000 grados centígrados a la pasta termoconductora y esas cosas.

      Lo mío son más las chorradas tipo "Internet Destruye Infancias". A ver si Yibrael se anima a darle a sus poderes nigrománticos... :P

      ¡Un saludo! :)

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  2. Jajajaja, creeme, he pasado por ello, los cursos de formación, ains... Y también tengo objetos de los ancestros que hay que honrar porque el espíritu de la máquina late fuerte en ellos ;-)

    Salud!

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    1. He hecho muchos cursos, algunos incluso por realización personal, pero es que en este me sale esa venilla a lo Bender de matar a todos los humanos...

      Yo solamente digo que mi vieja Game Boy sigue funcionando como el primer día... xD

      ¡Hasta otra! :)

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  3. A tu última frase le metes un riff negrata en plan gansta rap madafaka y te hinchas a vender copias de tu single...

    Yo también adoro las cosas viejas que me hacen la labor con gusto, como mi pececito viejuno, que de vezx en cuando me sustos pero ahí está dándolo todo.

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    1. Iba a haber contratado para ello a la orquesta sinfónica de Londres pero se me adelantaron los de Cypress Hill.

      Esta sociedad de consumo empuja a hacer todo lo contrario. Incluso en la WD hablaban una vez de un tipo que, atento, "¡nunca ha tirado una sola miniatura!". La razón del comentario era que se le quedaban viejas o algo así. Si GW hubiese podido vender sus miniaturas hechas a base de pasta de cebolla seca, lo hubiese hecho.

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    2. Qué güenos son los Simpson para hace coñas... ¿Minis de cebolla seca? Estás hablando de más... como te lean "ellos", la cagamos.

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    3. Los Simpsons ya lo hicieron. Y si no, que les pregunten a los de South Park.

      ¿No hubo ya acaso intentos de comercializar dvd's con un número limitado de reproducciones y teléfonos desechables? Si ganas no faltan...

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  4. jaja menuda máquina de leyenda, ahora en serio, opino como tu, yo llevo con mi teléfono cinco años y todo el mundo diciendo que lo cambie, y hasta que se rompa pienso seguir con el, que las cosas valen mucho dinero y esfuerzo como para cambiarlas cada dos por tres por que nos lo diga el nuevo anuncio de iphone XD.

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    1. Mis más sinceros respetos a tu actitud. Yo tuve que cambiar de teléfono a uno de esos que tienen "telequetexto" por dos razones: la primera por obligaciones de mantener el contacto con muchas personas por el "Quepassa" y el "Telegramo". La segunda, que los teléfonos normalmente no aguantan impactos de 100 newtons contra las paredes. Malditos "Eye-phone"...

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  5. Ese portátil es un tesoro, yo soy poseedor de un nokia 2760 desde hace 9 años y funciona de maravilla, no tiene whastsapp ni falta que le hace y no lo cambio hasta que muera.

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    1. Añado información al mensaje anterior. Yo ni siquiera quise nunca un teléfono. Me compraron mis padres un Nokia 3310 por sus huevos toreros cuando tenía 17 años. Les dije que no lo quería y les dio igual. Más tarde lo cambié por un tubo de escape para un ciclomotor y me acabaron encasquetando otro. la gente se comporta como zombies en ambos sentidos; descerebrados que quieren contagiar al resto.

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    2. ¿Cambiaste el teléfono móvil por un tubo de escape para la moto?

      Si alguna vez reúno las bolas de dragón, te dejo elegir el deseo.

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    3. No sabía lo que hacía, era joven, y necesitaba el tubo de escape...

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