viernes, 26 de septiembre de 2014

Internet destruye infancias: Saint Seiya


Recientemente he visto que se ha estrenado una película de animación por ordenador de otra de esas series que de un modo u otro marcaron mi infancia, al igual que la de multitud de chavales de mi generación. De modo que aprovechando la situación voy a volver a sacar todo el sarcasmo del cual suelo hacer gala para hablaros de estos masoquistas irredentos; los Caballeros del Zodíaco. El argumento de la susodicha serie se reduce a una palabra; hostias. Hostias y más hostias. Habrá quien se ofenda por mencionar el cuerpo de Cristo, pero no se puede esperar que alguien vea una este tipo de serie sin llamar a las cosas por su nombre. Vale, perdón, animé shonen. ;P


La historia comienza con Mitsumasa Kido, un viejo pervertido que se dedicó en sus años dorados a tener un centenar de hijos por el mundo en tan solo tres años (no he dicho un centenar por azar, el viejete era un fenómeno) que, tras quedar huérfanos de padre, fueron separados del resto de sus familiares y enviados a pasar aún más hambre y penalidades si cabe a varias de las regiones más inhóspitas de la tierra con el objetivo de prepararse para ser dignos guardaespaldas de una chica a la cual no han visto en su vida. De la susodicha muchacha se comenta que es en realidad la reencarnación de la diosa Atenea, aunque a lo largo de toda la serie lo único que se la ve hacer son trucos de luz con su bastón mágico, algún círculo de protección contra el mal y poco más. Puedo afirmar pues que Jesucristo le daba mil vueltas como semidiós, a pesar de ser uno de los semidioses más "tracas" que ha tenido la humanidad. Por lo menos Jesucristo tendría sobre 1000 puntos de golpe, regeneraba cada turno y los gomazos se los comía él solito sin la ayuda de nadie. Pero me estoy distrayendo.

Con el tiempo, los caballeros del zodíaco demostraron una fe inquebrantable en su diosa. ¿Fe en qué exactamente? Pues ni idea. Supongo que tendrían fe en que por lo menos iban a pagarles las facturas del hospital, cosa que nunca ocurrió. Desde el principio vemos cómo se pegan con todos los caballeros que están por encima de ellos dentro de su jerarquía. Se zurran entre los caballeros de bronce para luego cascarse contra los de plata y después contra los de oro; se pegan con deidades chungas y hasta le parten la cara al mismísimo Hades. Se dedican a recibir todos los guantazos del mundo para demostrar que la suya es la mejor de las diosas. ¡Por favor, hasta el mayordomo de Atenea les zurraba de latigazos! Y nunca acababan de lamerse las heridas para cuando la tal Saori Kido volvía a meterse en problemas.

Cuando pensamos en trabajos horribles nos puede venir a la mente cosas como repartidor de pizzas en invierno o inspector de calidad de guisantes, pero el de los susodichos caballeros se lleva la palma. En ningún momento vieron remuneración alguna por todos sus esfuerzos. No tenían siquiera un armero que les reparase las armaduras que tanto les costó ganar, que tan poco protegían y que tan fácilmente se resquebrajaban como porcelana vieja. Ellos y solo ellos, los últimos monos en la jerarquía de una incomprensible organización religiosa son los únicos que en ningún momento dudan de la divinidad de Atenea. Tras la batalla de las doce casas les pulieron un poco las armaduras y les dijeron "buen trabajo", pero en ningún momento les dijeron que subían de rango ni nada. Vosotros a pringar, que se os da bien.

Lo curioso del caso es que pese a haber vencido a todos sus hermanos en combate y a otros dioses rivales de Atenea siguieron siendo de rango de bronce durante toda la historia, que si exceptuamos a aquellos robots humanoides que se inventaron como Caballeros de Acero y al mayordomo de los latigazos, son los últimos monos de la empresa. Alguna vez les pusieron la miel en los labios y sus hermanos mayores les dejaron llevar armaduras de mejor calidad, pero fue porque en esos momentos estaban algo vagos o estaban muertos o los estaban matando de un solo golpe. Porque esa es otra historia. En las ovas, los caballeros dorados eran siempre los primeros en morir, y la mayoría de las veces a causa de uno de esos golpes místicos que te tocan y te matan como los pinchos a Megaman.

Y ese es otro tema, el asunto del cosmos. El cosmos es la energía que usan los caballeros para pegar sus super-guantazos. Que si "elevaré mi cosmos hasta el máximo", que si "debo reunir todo mi cosmos para lanzar el ataque que seguramente acabe con mi vida y tal vez con la de mi adversario", que si "me arde el cosmos"... Todo ello envuelto del típico misticismo esa es otra. Vale que lo que tenían que aguantar no era ni medio normal, y tal vez por eso tenían unas personalidades tan asquerosas. Uno lloraba por cualquier cosa, otro se enrabietaba y no paraba hasta matar a todos, el de más allá se sacó los ojos a sí mismo con tal de que su oponente se callase la boca, fulano se iba en camiseta a visitar a su madre muerta a las profundidades del océano ártico y mengano pasaba de los anteriormente mencionados, salvo que estuvieran en verdadero peligro e iba a comer chuletones como el que más.


Por último solamente decir que quienes hayan visto la serie saben que todo cuanto he mencionado lo he dicho a grandes rasgos. Estoy seguro de que cada cual tendrá en su memoria el recuerdo de alguna escena que le parecería una fajada digna de los Mercenarios 3. No me extraña que haya tanto loco por el mundo.

- Ha elegido usted: sin plomo 95.

13 comentarios:

  1. Yo me acuerdo bien poco de la serie y de haber visto algún capítulo suelto pero de lo que me acuerdo sobretodo es de 2 cosas:
    1- Fénix nunca muere
    2- La gran intro en castellano, en especial cuando dice "demoniacás"
    y "la canción de los heróes" https://www.youtube.com/watch?v=XTkc3e1741w
    Muy grandes XD

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  2. Definitivamente eres un grande... y menudas mierdas nos tragábamos de chicos XDDD

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    1. Solo he dicho lo que todos pensamos. xD

      De críos tendemos a aceptar la realidad tal y como nos la presentan.

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  3. A mi me parece curisoso tambieel ramalazo homo que tiene la serie... La escenita de cuando no recuerdo que caballero dorado se carga al Cisne y creo que Andromeda, lo abraza para traspasarle su fuerza vital, chacra, cosmo o lo que sea para que no palme es digna del mejor festival de Cine Queer....

    De hecho, cuando la vi de niño estaba convencido de que Ikki (Andromeda) era directamente tia y no me comia la cabeza con estas cosas´

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  4. El anterior comentario está hecho sin ningún tipo de jucio moral sobre eso, que a mi a me parece lo mas normal del mundo que no soy prejuicioso... Vaya por delante ejejje

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    1. Es una de esas cosas que no puedo decir de forma abierta y/o directa para evitar herir sensibilidades de gente con unos gustos que son de lo más normal del mundo como bien dices. En base a cuanto he visto, la androginia comenzó a darse con mayor regularidad en un montón de productos de la década de los ochenta bajo la intención de abrir mercado con la estética de un colectivo que empezaba a estar en la cresta de la cultura y el arte popular.

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  5. Y sin embargo se me hizo más fácil de ver, que la de Dragon ball. Nunca entendí esa serie...

    Y lo que molaba tener a tu caballero del zodiaco?? Y lo tolerantes que somos con el mundillo gay despues de conocer a Shun, caballero de andromeda?? Y lo que molaba cuando llegaba el fenix en el último momento y se cargaba a todos??

    Ainnsss que recuerdos....XD

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    1. Ambos universos distan mucho del mundo real, pero el problema que yo veo en Saint Seiya es que la horrible mezcolanza cultural que usaron para dar forma al universo trata de asemejarse con la del mundo real.

      Molaba... si lo tenías. Antes de eso aprendimos a NO aceptar a los demás tal y como son (en un colegio católico en mi caso) y luego tuvo que venir un dibujo animado a recordarnos lo contrario. Molaban las alucinaciones de putrefacción y muerte, eso sin duda. xD

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  6. Jajajaja gran entrada!

    Ciertamente era una cafrada gorda...

    Mis partes favoritas? OJO SPOILERS

    - Cuando Shiryu regenera en la casa de Mu las armaduras de Seiya y la suya con su sangre, ahí cuatro capítulos con las venas abiertas y sangre goteando y el tío de pie.

    - El Maestro de Siryu, que de viejete morado resulta que luego es Dokko de Libra, y rejuvenece a la de chas en la Saga Hades!

    - También de la Saga Hades. Tenéis que morir y buscarme en el Inframundo y bla bla... y llega Ikki y como es el Fénix pues hala, que me meto en el infierno tal cual, jajaja!

    Y mejor no hablemos de Lost Canvas o el Episodio G... que si Omega es malo, con eso de no, Seiya se ha ido... telita

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    1. Jajajaja grandiosos momentos.

      - Momento de lucidez al ver que si iba a morir, mejor que la armadura de Seiya aproveche toda la sangre.
      - Claro que si, solo tienes que reducir el número de latidos de tu corazón a uno por día. ¡Facilísimo!
      - Había estado allí de veraneo muchas veces. xD

      De esa parte ya no guardo tantos recuerdos... y creo que es mejor así.

      ¡Gracias fiera! :P

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  7. Peor era lo de los power rangers y los ataques epilépticos que les daban cada vez que abrían la boca XD

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    1. Ignoro lo que intentron si es que intentaron algo, pero viendo los Power Rangers aprendí a hacer temblar los ojos a lo Marujita Díaz. Inquietante...

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